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SOBRE ELLA
Lana Fox tiene 24 años. Es una chica afable que le encanta conocer gente nueva de cualquier tipo, sean o no parecidos a ella. Llegó a la ciudad sin nada y fue conociendo a personas que la ayudaron a hacerse un hueco e ir creando su vida, así que tiene un gran sentimiento de deuda y agradecimiento hacia todas ellas. Valora muchísimo la lealtad, pues es capaz de no confesar absolutamente nada aunque su propia vida esté en peligro con tal de proteger a aquellos que le importan, por muy mal que lo hagan. Por el mismo motivo, muchas veces peca de inconsciente y se mete en líos que no debería por ayudar a aquella persona de confianza que le pide ayuda.
Siempre se ríe por prácticamente todo y suele estar de buen humor, pocas cosas pueden sacarla de quicio, aunque no tiene reparo en ser más fría, seca o incluso borde con la gente que va a molestarla a ella o a sus amigos. Este lado suyo puede llevarse al extremo si alguien hace daño a los suyos, siendo capaz de incluso lo impensable solamente por pensar en que alguien ha hecho algo malo a los suyos. Además es muy terca, así que si quiere saber o hacer algo, intentará de todas las formas posibles conseguirlo, aunque siempre sin molestar al resto, o al menos intentarlo.
Es una persona a la que le gustan bastante los chismorreos y le encanta que sus amigos vengan a contarle cosas que les han pasado, pero no quita que sabe escuchar e intenta aconsejar siempre mostrando empatía y dando su opinión más sincera, desde el respeto y el cariño. Se puede contar con ella para cualquier problema, por ínfimo que sea, y puede valorar la situación de forma objetiva y dar su punto de vista con el mayor tacto posible.
HISTORIA
Lana Fox nació y vivió en Arcadia, un pequeño pueblo fuera de San Andreas. Sus padres son arquitectos de prestigio, así que vivió de forma acomodada y teniendo todo lo que quisiera, aunque nunca fue de pedir grandes lujos. Durante su infancia y adolescencia fue una chica ejemplar, tanto en comportamiento como en rendimiento académico. La relación con sus padres y su hermana siempre fue buena hasta que terminó el bachillerato y decidió entrar en Bellas Artes. En ese momento, las cosas en casa cambiaron ya que sus padres no estaban de acuerdo con esa decisión, pues pensaban que seguiría sus pasos y estudiaría arquitectura.
Con 18 años se mudó a San Francisco para cursar la carrera, en la que estuvo cuatro años. Considera que esa etapa de su vida le abrió mucho la mente y le hizo madurar, ya que significaba un cambio por completo de aires, saliendo de su pequeño pueblo a una gran ciudad, conociendo a gente nueva de todas partes del mundo. Esa experiencia le sirvió para reafirmarse más en su convicción de ser artista y alejarse por completo de la trayectoria de sus padres.
No obstante, al terminar la carrera, volvió a Arcadia para trabajar con sus padres, con el único fin de hacer algo de dinero para poder irse de casa y empezar a formar su propia vida. Pero sus padres, viendo que Lana trabajaba en su estudio de arquitectura, pensaron que había recapacitado y quería finalmente dedicarse a lo mismo que ellos, y cuando ella les dijo que no era así, discutieron muy fuerte hasta el punto que Lana hizo no aguantó más la situación, hizo la maleta y se fue de forma definitiva.
Decidió mudarse a Los Santos para empezar una vida nueva desde cero, sacándose las castañas del fuego ella sola y trabajando de lo que fuese necesario para poder hacerse un colchón, tener una buena casa y acabar viviendo de lo que le gusta verdaderamente, que es el arte.