Schneyder Castaño



  • NOMBRE COMPLETO: Schneyder Castaño

    EDAD: 30 Años.

    LUGAR DE NACIMIENTO: Medellin-Colombia.

    NACIONALIDAD: Colombiano.

    SEXO: Hombre.

    Historia

    En el año 1981, Fidel Castaño le propone matrimonio a Kate Lynch procedente de EE.UU. Unos años después, específicamente el 30 de agosto de 1987, nace Schneyder Castaño.
    Su familia estaba algo dividida. Era sabido que varios de los Castaño estaban asentados en Estados Unidos. Mientras que el resto de su familia residía en Medellin, Colombia.

    Kate tuvo otro hijo en el 1989, a quien llamaron Carlos. Schneyder se encontraba bastante contento, pues con 2 años tenía un hermanito pequeño. Sin embargo, la alegría duró poco, y el pequeño bebé falleció por neumonía a las dos semanas de su nacimiento. Para los Castaño fue un golpe duro.

    La madre de Schneyder comenzó a empastillarse por el dolor, y entró en un profundo pozo depresivo. Se culpaba constantemente de la muerte de su segundo hijo, y no veía ninguna salida. Una noche de martes, se subió a la terraza del bloque de viviendas donde residían, y sin pensarlo se lanzó cerrando los ojos. Es de esta manera, que Schneyder creció con los cuidados de su padre Fidel. La temprana muerte de su hermanito pequeño y el suicidio de su madre, generó una actitud bastante introvertida en Schneyder.

    Era sabido por la zona, que Fidel planeaba mudarse de Colombia. Quería establecerse en Estados Unidos, ya que creía que había más oportunidades tanto para él, como para su hijo. Con la decisión ya tomada, los Castaños emprendieron vuelo hacia Los Estados Unidos sin mirar atrás. Schneyder se prometió a sí mismo, Que lograria sus objetivos.

    Schneyder creció el resto de su infancia y principio de su adolescencia sin amigos. Asistía a clases, tenía notas aceptables dentro del promedio, y no tenía amigos. El hecho de ser bastante introvertido le generaba problemas para socializar.

    En su casa empezaron los problemas, ya que su padre había conseguido una novia adicta a la heroína. Schneyder sabía que aquella mujer estaba únicamente interesada en el dinero de Fidel, y que realmente no lo amaba. Por lo que usualmente, había alguna que otra discusión.

    Fidel Castaño era una persona amable y trabajadora dentro de su hogar. Pero tampoco vamos a mentiros. Fidel no trabajaba, o al menos no de la manera legítima. Se sabía que su parte familiar en los Estados Unidos, estaba asociada a los Carteles Colombianos. Estos realizaban diversas actividades ilícitas, desde una red de ladrones con tapaderas, hasta el contrabando de armas y lavado de dinero. Schneyder realmente no tenía ningún interés en cómo su padre conseguía el dinero, siempre que no le faltaran lujos.

    Debido a los problemas en su hogar, Schneyder con sus 14 años, empezó a tomar una actitud bastante rebelde en clases. Adoptaba una postura indiferente y de rudo, e intentaba dejar de lado su timidez, para poder lograr socializar en condiciones.Es así que comenzó a tomar ventaja sobre los demás jóvenes de la institución, llegando a amenazar o golpearlos si obtenía lo que quería. Básicamente, Schneyder se había convertido en un delicuente junto a sus nuevos colegas.

    Es por esta época, que su padre termina la relación con su nueva novia, puesto que ésta había intentado robar de su caja fuerte. Al ser nuevamente ellos dos por su cuenta, comenzaron a ser más cercanos, y Fidel vio potencial en su hijo Schneyder. De este modo, comenzó a darle consejos e instruirlo un poco en la vida del criminal discreto. Le enseñó sobre algunos de los negocios, actitudes que le servirían más adelante en diversas operaciones, y cómo debía cuidarse solo.

    Schneyder seguía todo al pie de la letra, y desarrolló un deseo de llegar a ser alguien temido en un futuro. Pues esto le traería todos los lujos y dinero que alguna vez había querido.

    Fue entonces cuando recibió la noticia de que la familia de su primo Freizer había sido asesinada en un incendio. Fidel , al ver que su sobrino estaba a punto de ser ingresado a un Orfanato por los Servicios Sociales, decidió adoptarlo sin pensarlo dos veces. Schneyder no sabía qué sentir. Por un lado se sentía feliz y emocionado por vivir con su primo, ya que habían tenido muy buena relación de pequeños. Pero por otro lado, se sentía triste por la muerte de sus familiares. Sin embargo, poco a poco se olvidaron de su muerte, y se centraron en cosas más importantes.

    Fidel Castaño se encargó personalmente de buscar toda la información, rastrear y encargar el asesinato de Harrison Purcell, el traficante que había incendiado la casa de los Rozo. Nunca se lo comentó a nadie de la familia, pero el trabajo se completó con éxito. Así, su sobrino Freizer podría vivir en paz sabiendo que su familia había sido vengada.

    Schneyder creció el resto de su adolescencia junto a su primo Freizer. Exactamente a sus 18 años, Fidel los introdujo de una vez por todas en el negocio. Desde un primer momento, comenzaron contrabandeando paquetes de droga o algún arma pequeña, de un lado a otro de la ciudad. Ya sea en largas caminatas o en bicicleta, ambos se encargaban de que el paquete lograra llegar del punto A al punto B sin ningún tipo de problemas.

    Eventualmente, aquellos simples negocios quedaron atrás, y fueron puestos a disposición de un grupo interno de los Carteles. Ahí fue donde Schneyder se dio cuenta, que la violencia era un plato dulce que quería seguir teniendo el resto de su vida. Debían cobrar impuestos por protección, mediante la extorsión. Y el que se negaba, terminaba con las piernas rotas.

    Schneyder sabía que su primo Freizer se sentía algo raro realizando los encargos, por lo que decidió hablarle a solas. Le dejó claro que estaban juntos en esto, y que no había vuelta atrás. Y tras unas horas conversando, logró convencer a Freizer para que se enfoque 100% en hacer todo lo que los Carteles ordenaran. Así, los dos jóvenes Colombianos comenzaron su escala en la Organización, a base de violencia y sangre derramada.

    Durante los siguientes años, la rutina se volvía monótona y aburrida. Robos de vehículos para ser desguazados, alguna estafa oportunista y los contrabandos de armas de alto calibre. Pero la situación cambió para Schneyder, y esto jamás se lo comentó a su primo.

    Fue citado personalmente por el cabecilla del Cartel, quien estaba en prisión. Tras acudir al encuentro en la prisión, Se introdujo a Schneyder en un numeroso grupo interno que se dedicaba a los robos a propiedades. El plan era simple. Cuando los Colombianos intentaban extorsionar a alguien y éste se negaba, enviaban a dicho grupo a robar su propiedad o negocio. Entonces, aquella persona no tenía más remedio que aceptar el impuesto por protección. Sin más, Schneyder aceptó la orden de su superior.

    Formó parte de varios asaltos a propiedades, pero uno destacó entre todos. Uno que jamás iba a mencionar ante nadie, y solo los cuatro participantes saben lo que ocurrió. Schneyder se juró a sí mismo que nunca le diría lo que sucedió ni a su padre ni a su primo.

    Era una noche de viernes y necesitaban atracar un hogar en los suburbios de la ciudad. El objetivo era simple, ya que se suponía que no iba a haber nadie dentro. La casa había estado vacía durante los últimos tres días. Debían entrar, robar varios electrodomésticos y objetos valiosos, y destruir algunos muebles para finalizar. Si todo salía correctamente, seguro que los dueños de la casa iban a pagar el impuesto por extorsión. Pero todo se jodió.

    Schneyder formaba parte de uno de los cuatro Colombianos que se dirigieron a efectuar el robo a la propiedad. Nada más entrar, divisaron a una anciana en silla de ruedas y a un joven. Ambos de etnia latina, tez de color café y que no hablaban el inglés. El Colombiano que estaba a cargo del robo, Caleb, ejecutó a sangre fría a ambos residentes del hogar. Schneyder se quedó completamente atónito ante lo que acababa de presenciar, lo que resultó en más muerte, ya que él era el que debía vigilar la parte trasera de la casa.

    Por detrás entró el dueño de la casa, un mexicano de 40 años aproximadamente. Nada más entrar y tomar la escopeta, reventó de un balazo el cráneo de uno de los Colombianos. Los otros dos lograron reducirlo, y Caleb enfurecido, obligó a Schneyder a matar al mexicano. Debía enmendar su error.Sintiéndolo completamente y en contra de su voluntad, Schneyder tomó un arma y la colocó en la nuca del hombre. Mientras soltaba unas lágrimas e intentaba no oír a Caleb que le gritaba que lo hiciera, Schneyder apretó el gatillo.

    El tiempo pasó, dejando el suceso que marcó la vida de Schneyder en el pasado. Él sabía a lo que se estaba exponiendo si dejaba entrar la violencia a su círculo cercano. Pero nunca esperó que tuviera que matar a alguien de manera tan temprana, y menos en esas condiciones. Es de este modo que Schneyder entendió los sacrificios que conllevaban tener una vida al margen de la ley.

    A pocos meses de cumplir sus 20 años, la guerra entre los Armenios y los Colombianos estalló. La Masacre de Medellin dio como resultado 34 muertos y 18 heridos, lo que atrajo la atención de agencias federales. Para colmo, el cabecilla del Cartel fue asesinado en prisión, y el padre de Schneyder tendría que tomar el mandato.Sin embargo, Fidel sintió miedo por primera vez, el cual se apoderó completamente de sí mismo , pero este no tenia mas opcion.

    Luego de 3 años Schneyder y Freizer se les fue otorgado irse para la ciudad de Miami, Para empezar a mover el negocio por ese lado de Los Estados Unidos , Con Fidel al mando los primos tenian mas poder ya que con frieldad mataban a toda persona que se atravezara en las ordenes dadas.

    En la actualidad y luego de la muerte de Fidel y con el Cartel acabado por los agentes federales, Schneyder y Freizer empezaron una nueva vida ya no existia tal respeto por los Castaño , por que habian nuevas bandas criminales los primos tomaron la desicion de empezar una nueva vida en Los Angeles juntos alli empezarian a ganarse la vida de la forma que ellos aprendieron.

    PSICOLOGIA

    -Schneyder es bastante reservado. Suele hablar poco, pero en confianza/borracho es un jodido loro que no lo calla nadie.
    -Es desconfiado con los desconocidos. Nunca se sabe con qué aires se te acerca alguien.
    -No suele dar promesas, y si las hace, se asegura de que se cumplan.
    -Por su pasado, cree que la violencia puede solucionar bastantes situaciones. Aunque sabe mantener sus límites, no duda en utilizarla.
    -Se irrita fácil, y por ende, se busca muchísimos problemas a la mínima. Esto suele traer discusiones con su primo, quien le incita a moverse con discreción.
    -Es bastante leal, y se considera alguien bastante transparente.
    -Le gusta tener una imagen a quien seguir, un sentido de pertenencia.
    -Por su pasado, está bastante acostumbrado a la soledad.
    -Tuvo que asesinar para salvar su vida en su pasado. Dado el momento, es su vida y la de sus cercanos la que valen.
    -Su único objetivo en la vida, es conseguir dinero. Solo le interesa progresar económicamente, para poder vivir una vida en mejores condiciones junto a sus cercanos.
    -En el ámbito romántico es bastante frío, por experiencias pasadas. Pero no es un impedimento para encuentros casuales.
    -Es complicado entrar en su círculo de confianza, solo pocas personas lo han logrado.
    -Le desagrada la gente de clase alta, la gente falsa, prepotente y con aires de superioridad.
    -Suele ayudar a los vagabundos siempre que puede. Vivió mucho tiempo con pocos dólares por semana, y sabe lo que es pasar frío y hambre.

    PERSONALIDAD:

    -Schneyder tiene una contextura física dentro de la media. Su peso ronda los 80 kilos, aunque tiene algo de musculatura debido a que entrenó en su época en Irlanda
    .-Es una persona de estatura alta, de 1 metro 85 centímetros.
    -Sus ojos son claros, y su cabello rojizo.
    -Solía mantener su cabello largo en su juventud. Pero en los últimos años, lo mantiene corto y arreglado.
    -Posee sangre tipo B+.
    -Tiene una herida en el abdomen, producto de una puñalada.
    -Sus codos están algo desgastados, ya que su piel se deshidrata fácilmente.
    -Generalmente adopta una postura dura, y se hace el indiferente. Como si no le importara nada realmente.


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