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"Redneck" y "hillbilly" son dos de las palabras más cargadas y complejas del idioma estadounidense. Cuando los usan las personas que viven en las ciudades, los dos términos, "redneck" en particular, generalmente apuntan a un montón de estereotipos de estados sureños: banderas confederadas, armas, racismo y una especie de ignorancia orgullosa y una referencia no tan sutil a otro.Los vecinos que suelen pasearse por el Motel de Sandy Shores se reunieron con algunos vecinos del condado para disputar un par de peleas, concursos de eructos y de sacar manzanas de barriles. El olor a pólvora y sangre en el aire es la mejor manera de pasar el tiempo por el desierto.
Los paletos creen firmemente que tiene un deber con la nación, ahora al descubrir a un sureño robando una tienda de condado y al desconocer a la justicia del gobierno han decido adelantar un juicio ciudadano, Dios y la bandera les dictan que deben cumplir con su deber a la patria. Un juicio justo ante los ojos de Dios.
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Después de buscar durante varias horas, finalmente avistaron un enorme caimán asomando su cabeza en el agua. Con sigilo, se acercaron al reptil, apuntando con sus rifles, y esperaron el momento adecuado para atacar. Finalmente, el momento llegó, y con precisión dispararon al caimán, dejándolo aturdido y debilitado. Con mucho cuidado, lo amarraron y lo arrastraron hacia la orilla, donde lo midieron y pesaron para asegurarse de que cumplía con las regulaciones de caza. Una vez que comprobaron que todo estaba en orden, los rednecks celebraron su éxito, sintiendo la satisfacción de haber logrado una caza legal y responsable. Luego, tomaron algunas fotos con el caimán y lo prepararon para su consumo, asegurándose de utilizar todo lo que pudieran del animal para evitar desperdicios.
Los vecinos se acercaron a una zona boscosa, se rumoreaba que en la zona el State Park a liberado a un oso.
Todos los días son diferentes en Sandy Shores. Tuvimos un día de sol donde planeamos salir de caza con los vecinos sin embargo cuando llegó el momento de salir comenzó a llover torrencialmente, obvio no nos iba a parar. Nos pusimos ropa adecuada y nos metimos al bosque con la rumpo hasta donde dió el camino y luego seguimos a pie. No sé, esperabamos encontra un venado, un zorro como mucho y mientras caminabamos en el bosque el viejo Frank se encontró unas huellas de jabalí, las empezamos a seguir despacio pero atentos, escuchabamos ruidos cada tanto pero no podíamos descifrar qué era porque la lluvia opacaba todo sonido. Seguimos internandonos en aquel bosque buscando al jabalí, no ibamos a parar hasta llevarnos ese trofeo a casa.
En un momento el animal nos sorprendió a todos saliendo de la nada, yo atiné en el reflejo a sacar mi pistola y gatillar varias veces a quemar ropa. El animal chilló y dejó un rastro de sangre, aparentemente le había herido la pata. Seguimos incansablemente el rastro del animal, tanto por sus huellas como por su rastro de sangre, el animal estaba herido y se nos hacía cada vez más fácil encontrarle. A lo lejos se escuchaba el chillido del jabalí, seguimos y seguimos hasta que Frank dió con el, buscamos un punto adecuado y cuando el viejo lo tuvo a tiró le dió con todo el peso de su vieja escopeta.
El jabalí era nuestro y podíamos volver a casa como ganadores. Y a preparar un gran festín claro está. Los muchachos me ayudaron a llevarlo a la granja y una vez allí nos encargamos de quitarle el cuero y demás. No nos importó la lluvia, volver llenos de barros ni posiblemente pescarnos un resfriado pues el objetivo se había cumplido.
Sandy Shores es un pueblo que puede amarte y cuidarte... siempre y cuando tu hagas lo mismo con el. Solamente la gente del pueblo sabe lo que pasa en el pueblo, nadie más tiene por qué venir a meter sus narices en el pueblo y menos una persona que pasa una vez cada muchos años solo por votos, si, hablo del alcalde que se postula para gobernador, el maldito demócrata ese. El pueblo se enteró y se reunió frente a su caravana para explicarle algunas cosas, habían bastantes vecinos del pueblo explicándole un poco las cosas a los uniformados.
En el condado de Blaine las cosas son simples, al igual que la vida de Jhonny, un hijo de los Estados Unidos de América temeroso de Dios y patriota hasta las pelotas. Un malviviente que vive borracho o drogado, Jhonny es un tipo duro, se le puede ver por las calles de Sandy vendiendo cocaína y si no es así lo vas a ver borracho, drogado intentando hacer piruetas con su motocicleta. Siempre está buscando un negocio que le de dinero o apostándolo para triplicarlo en una mesa de poker.
Matadero - Primera parte.
Me reuní con los muchachos con la idea de preparar unos pedidos que teníamos de carne. No siempre salen y cuando está la posibilidad hay que aprovecharla, lamentablemente solo conté con Percy y su primo Alfred pero fue suficiente para matar un par de vacas. Nos juntamos en el rancho O'neill y fuimos hasta donde estaba el ganado. Cuando la granja de mis padres se remató, movimos todos los animales al rancho y por lo menos no perdí el negocio de la carne. Luego de charlar un rato y preparar los cuchillos y los machetes fuimos donde las vacas, eran vacas mansas que habían pasado su vida ahí pastando y encerradas entre cuatro barandas, así que no fue muy dificil irles con el machete directo a la gargata, le dimos varias puñaladas para que caiga, dejamos que eche toda la sangre y luego despellejamos todo para cortar en trozos las partes. Percy y Alfred eran nuevos así que tuve que supervisarlos un poco pero luego tomaron buen rumbo. Matamos dos vacas.
Dejé a los muchachos para que embolsaran todo y lo cargaran a la camioneta, fuí a ver los cerdos para preparar la próxima faena y todo iba bien, el pueblo estará bien suministrado de carne. Cuando volví ya tenían todo cargado, estos muchachos si sirven para trabajar y hasta me caen bien y todo. Les voy a invitar una parrillada de cena por ayudarme.
La barbacoa - Segunda y última parte.
Luego de la matanza en el rancho fueron a enfreezar la carne y aprovechar para hacer una parrillada de cena, tenían que probar la carne. Sacaron la barbacoa y armaron todo en la licorería. Percy se encargó de asar la carne, yo quería darles un regalo más aparte de eso así que esperé que terminaramos de comer y saqué un paquete de coca para todos, no creo que haya sido buena idea. Yo estaba bastante perseguido por el tema policial y a Percy, bueno a Percy no le cayó tan bien, se puso bastante paranoico y empezó a correr al lago hasta sacarse la ropa. Intenté calmarlo pero había consumido mucho y estaba bastante paranoico, tema de su cabeza.
¿Será todo por la llegada de los Dixies?
Las cosas se iban acomodando por el pueblo, los Pagans se volvían a ver por el bar y los yonkies empezaban a salir más del motel, ¿Será todo por la llegada de los Dixies? Jhonny y algunos muchachos más se estaban encargando de restaurar la sede y volver a armar el club de los Dixies y todo pintaba bien. Siempre trata de que a los yonkies no les faltase nada y se ocupaba de venderles la droga a buen precio para que ellos sacaran su tajada también. Jhonny era un muchacho muy atento y siempre lo ibas a encontrar por el pueblo viendo qué hacía falta. Los Dixies Renegades MC es un club de amante de las motocicletas y los motores pero a decir verdad si te pueden vender una parte de la moto por droga, lo harán. La mayoría son borrachos mal olientes pero todos tienen en común una cosa, quieren lo mejor para el pueblo y harán lo necesario para darselo. Todas las noches Jhonny suele pasarse por el motel a dejar algunos paquetes de coca a los Yonkies, algunos se los consumen y otros los venden, hay que decir que hay varios paletos rescatables de ese lugar.
Jhonny era el que estaba llevando las riendas del club pero tenía bastantes muchachos que le ayudaban a rodar esta ruta. No tenían las mejores motos pues su dinero no era demasiado y las que tenían eran bastantes antiguas, con algún defecto y todas oxidadas descuidadas pero si era seguro una cosa y es que las usan muy bien.
Sandy Shores es del pueblo.
Sandy Shores, nuestro pueblo. Al mismo que le toca ver todo lo que sucede, porque si el pueblo hablara... Me despierto con la información de que aparecieron unos falsos Dixies queriendo reclamar algo al pueblo. ¿Mi pueblo afectado por idiotas que creen que pueden portar mi parche? ¡De locos! Dixies solo hay uno y es el club que fundó Huck, ningún otro. Cayendo la presidencia en mi, Jhonny Hill. Tuve que encargarme de hablar con los Pagans para enterarme que había pasado, fuimos con los chicos y algunos yonkies del motel, hablamos y optamos por resolver la situación juntos pues a los dos nos involucraba el problema. Salimos en una caravana que atravesó todo el pueblo con un solo objetivo, buscar a esos falsos Dixies.
Huck me tiró el llamado de que los tipos estos andaban rondando la licorería y es que yo cuando me levanté también había ojeado algunas motos en una casa al lado de la licoreria pero no le dí mucha importancia, el hecho que era en esa casa, en ese lugar dónde estaba viviendo este club. Les golpeamos la puerta hasta que fueron saliendo de a unos, los levantamos en las camionetas y nos los llevamos lejos. Nosotros les dejamos en claro que ellos no eran Dixies y que jamás lo iban a ser, y los Pagans, bueno... Los Pagans les hicieron más que eso.
VIEJOS NEGOCIOS.
Me había llegado el rumor de que andaban unos tipos preguntando por el tio Sam, vaya el viejo sigue haciendo ruido aún estando en silla de ruedas en pleno asilo, que locura. No dí mucha importancia, el tio Sam conocía mucha gente y no toda era grata de conocer. Sin embargo estos tipos fueron bastante insistentes tanto hasta seguirme fuera de mi almacén. Cuando hablé con ellos parecían personas serias y directas, no obstante no terminaba de confiarme pues no tenía al Tio Sam para corroborar su historia así que solo dejé llevarme por mi instinto y me arriesgué a confiar en ellos.
Días días después
Los tipos parecían bastante profesionales, me esperaron en un punto para escoltarme hasta el lugar, me dejaron probar el paquete, cuando ví toda la cocaína que acordamos y la calidad que tenía sabía que había ganado. ¡Eureka maldita sea! Era una excelente calidad y la cantidad exacta que me había prometido, ahora tocaba pagarle, tenía mi bolso con $75.000 dolares dentro, podían matarme y quedarse con todo, sin embargo no pasó. Bambi hizo un trabajo fino, me escoltaron hasta la entrada del condado de Blaine asegurandose de que el paquete llegara sano y salvo. Cuando llegué le avisé y todo quedó ok, me habló Frank para tomar unas cervezas en el bar de Pagans, este hijo de puta siempre hablando de política, no fue la mejor forma de festejar un negocio pero por lo menos estaba con mi colega Frank.
UN DÍA A LA VEZ.
Como Dixies, nuestro deber siempre es cuidar lo que es del club. La gente del motel, los yonkies están moviendo nuestra coca así que tenemos que darnos alguna que otra vuelta por ahí para corroborar que todo esté bien, nos llevamos bastante bien con la mayoría de los yonkies y a veces hasta compartimos jeringuillas, son buenos chicos y ellos también muestran interés en ayudarnos así que es algo mutuo. Hoy fue un día más o un día menos, como quieran decirle. Vendimos un poco de coca en la licorería moviendo el mercado de ahí y supervisamos algunas ventas de los yonkies en el motel, todo va bien pero no queremos apurarnos, vamos viviendo *un día a la vez.
Ammunation abierto al público, indumentaria y cursos de caza.
Frank y Jhonny pusieron a andar el Ammunation del pueblo formando una sociedad para llevar este negocio. Con Frank a la cabeza se pueden dar cursos de caza con mucha eficiencia debido a la experiencia del viejo, y bueno conmigo... conmigo pueden conseguir todo el arsenal que se necesite para ir de cacería. Apenas habíamos abierto y ya teníamos gente adentro, ni siquiera me dió para terminar de preparar todo que tuve que hacerlo con el cliente adentro. Atendimos bastantes clientes y vendimos casi todo el stock que habíamos preparado para esa noche, corroboramos todo y luego de la jornada salimos a fumarnos un tabaco afuera mientras disfrutabamos de la cálida noche estrellada que nos brindaba el pueblo.
Cortando la coca para triplicar las ganancias.
Los Dixies están entrando fuerte al mercado de la cocaína y se están apoyando mucho en las ventas del motel pero claro, todo tiene un techo y estos drogadictos malnacidos van a arrancarlo. La idea es tomar un par de paquetes de cocaína de la más pura calidad y mezclarla con yeso molido. Yeso molido que se encargó de conseguir el maldito Frank después de raspar las paredes del motel. De esta forma de dos paquetes vamos a hacer ocho, diez. Y las ganancias se triplicarán también, un maldito negocio redondo donde se bendice el gran hombre blanco de américa. Por suerte tenía a Percy que me ayudó a cargar todo junto con Gordon pero el se mostró más interesado en aprender y ayudar al proceso de cortar la coca, obvio le dí un premio para que se sintiera motivado, algún tirito de cocaína, de la buena claro está.
Oye, compadre, déjame decirte una cosa bien clara: la caza es como el pan nuestro de cada día para los paletos de verdad. Es una pasión que nos corre por las venas y nos hace sentir vivos en medio de la naturaleza. Cuando salimos al monte con nuestra escopeta al hombro, nos convertimos en auténticos reyes de la selva. Ahí, entre los árboles y los matorrales, cazamos como si no hubiera un mañana, persiguiendo a esos bichos con astucia y paciencia. No hay nada como el olor del campo, el sonido de los pájaros y el crujir de las hojas bajo nuestros pies. Para nosotros, la caza es más que un simple deporte; es una tradición, una forma de vida.
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