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En un barrio de población oriunda de México y olvidado por el gobierno estadounidense, vive Aleida Diaz, junto con sus padres y su hermano mayor, Enrique. Su vida nunca ha sido fácil, pero en los últimos años, debido a la crisis económica del país, su familia ha ido de mal en peor. Luego del accidente automovilístico de su hermano, Aleida se vio obligada a buscar pequeños trabajos cercanos a la zona. Desde su llegada a los Estados Unidos ha tenido que luchar contra la discriminación y los prejuicios de una sociedad norteamericana muy arraigada con el estereotipo de mexicana. Aleida es una joven muy capaz, a sus 25 años siente que su vida está para otra cosa. Sus padres siempre proyectaron su deseo de que sus hijos tuvieran una buena vida entrando en las fuerzas policiales. Lejos del resentimiento que guardan ciertos mexicanos a la policía estadounidense, Aleida considera que ese es su lugar. Luego de que su hermano quedará en silla de ruedas, los deseos de sus padres se esfumaron, creían que Aleida sólo servía para colocar uñas postizas en un sucio sucucho del barrio, pero la historia está lejos de ser así. Sin lugar a dudas, Aleida es una joven emblemática, dispuesta a dar todo por los suyos y a soportar las malas pasadas que le puede jugar la vida por su carácter. Sin embargo, guarda un gran respeto a los valores nacionales del lugar que le dio un techo y comida, a veces se siente más estadounidense que mexicana, especialmente luego de un par de años de haber adoptado la ciudadanía. A veces extraña su pueblo en México, del que guarda escasos recuerdos por haberse ido de aquel país cuando era pequeña. Suele dedicar sus días al trabajo y a realizar ejercicio por el desierto árido, le gustan los atardeceres y la cerveza fría. Odia las injusticias y cree que es posible el bien común.
Lexie Williams Jones es una joven estadounidense, oriunda del norte de Estados Unidos. Vivió toda su vida en un pequeño pueblo conservador y tradicional junto con su familia de escasos recursos. Cansada del ambiente, decidió irse a Los Santos en busca de mejores oportunidades de vida.
Al llegar a la ciudad, se topó con que nada era como ella pensaba, tuvo que ingeniárselas para salir de adelante, recurriendo a trabajos de mala paga y trato. Su mal carácter e ingenio no le fueron de mucha ayuda pero luego de un par de meses pudo acceder a un pequeño departamento. Lejos de amargarse por su situación, es una chica que siempre busca salir adelante y ser "alguien" en la vida. Muestra un fuerte rechazo por los movimientos políticos de neoliberales yankees, cree en la paz mundial y tiene fuertes ideales vinculados con un mundo mejor. Le gusta la comida rápida y tomar cerveza los viernes a la noche, aunque también dedica varias horas de su semana a mantenerse en forma.
Su familia siempre quiso que ella entrará al ejército. Tiene cuatro gatos que ama y cuida.
En líneas generales, se podría decir que es una chica con mucho por dar en cualquier ámbito donde se desempeñe. Su historia aún está por comenzar.
Joven oriunda del Estado de Alabama, donde creció y pasó la mayor parte de su niñez y adolescencia, viviendo junto con mi padre, un oficial de la policía que actualmente se encuentra retirado. Al cumplir los 20 años, decidió mudarse a la ciudad de Los Santos para poder emprender un nuevo capítulo de su vida. Desde su llegada, tuvo varios trabajos: profesora de yoga, cajera en un pequeño 24/7, etc.
Sin embargo, siempre tuvo la convicción de que su vida debía estar orientada al servicio de la comunidad, tal como su padre le inculcó desde pequeña. Desde entonces, realizó trabajo comunitario en varios barrios de South Central, que la ayudaron a llenar esa necesidad de hacer algo por el otro. En lo que a sus gustos respecta, además del servicio comunitario, es una apasionada de la naturaleza y la meditación.
Realizó un profesorado de yoga y técnicas de destreza física para relajación y anti-estrés, tuve la oportunidad de dar clases en un pequeño gimnasio de la ciudad. Si bien la yoga es mi actividad física de preferencia, disfruto también del nadar y de los deportes en general. Dedicó varios meses de servicio al Departamento de Policía, hasta que se percató de que debía tomarse un respiro.
Stephanie Daphne Muller es una jóven de origen estadounidense, criada en un lujoso barrio de Miami Beach, hija de un famoso empresario, conocido por manejar grandes negocios con la clase rica de la ciudad, ha llegado a Los Santos hace varias semanas, pero su viaje de distracción no está siendo ni un poco lo que se imaginaba. A sus 20 años, su familia ricachona le dió la espalda por comenzar a salir con un jóven rapero, dedicado a la fiesta y a las malas juntas, por lo que se vió obligada a dejar su vida de lujos y comodidades para ajustarse a la apretada agenda de Jai-Di, su ex novio.
Al llegar a la ciudad de Los Santos, tuvo una fuerte discusión que la termino separando de quién creía su alma gemela. Solo con un par de billetes en el bolsillo, Stephanie tuvo que arreglárselas para sobrevivir en la movida y desconocida ciudad. Fue así como terminó dando con un grupo de hombres rusos, quienes le ofrecieron el trabajo de bailarina en el club. Deslumbrante por su cabellera rubia y su voz de niña mimada, Stephanie ha sabido ganarse la vida a pesar de los altibajos que le presenta la vida.
PERSONALIDAD: Stephanie a simple vista puede ser catalogada como una típica rubia sin muchas habilidades más que cuidarse la manicure, pero eso es sólo la carátula. Su corazón valiente y comprensivo hace que ganarse su amistad sea un regalo no muy difícil de conseguir. Un tanto frágil, la depresión le ha pegado duro los últimos años, especialmente luego del maltrato psicológico de su ex novio. Egocéntrica a más no poder, narcisista y vanidosa.
APARIENCIA FÍSICA: Stephanie es una jóven de 24 años con un cutis y una figura deslumbrante, producto de vivir apegada a los estereotipos de belleza de la sociedad norteamericana. Mide 1.70 y pesa 58 kg.
Aleshka, apodada por su familia como "Ale", es una joven de nacionalidad rusa que llegó a la ciudad de Los Santos con tan sólo nueve años de edad. Luego de 14 años desde su llegada en barco por el frío océano atlántico, Aleshka alquila un pequeño apartamento humilde en el este de la ciudad. Con los pequeños ingresos que obtiene cumpliendo turnos de cajera en un local de comida ha logrado independizarse económicamente de su familia, que siempre tuvo problemas de dinero. La vida de Aleshka no siempre fue la misma, el haber tenido que dejar su Rusia natal y demás situaciones traumáticas que la llevaron a su madre y sus hermanos a tener que abandonar su hogar, forjó en ella un carácter duro. Desde pequeña tuvo que hacer frente a los perjuicios de la sociedad americana, sus compañeros de colegio siempre hacían mención de su pasado y la muerte de su padre, rumoreándose que el mismo había muerto a raíz de un enfrentamiento con una de las tantas mafias pesadas de la pequeña Astrakhan, ciudad natal de la joven de cabellos rojos y piel pálida. Suele ser muy reservada, cuenta con unas pocas amistades que ha sabido mantener a lo largo de los años. Sin dudas, es una mujer desafiante, nunca sabes cuál será su siguiente paso, tiene un corazón grande y está dispuesta a dar todo por los suyos, en especialmente por su madre Yekaterina, que siempre puso esmero y esfuerzo en mantener a Aleshka lo más alejada posible de los conflictos de la mafia rusa. En las últimas semanas, se ha visto a Aleshka en reunión con un grupo de hombres de ropas oscuras, manejándose en autos elegantes y con una actitud un tanto discreta y de oculto. Su madre teme por ella, todo parece indicar que ha elegido el camino del que siempre intentó alejarla.
APARIENCIA FÍSICA: Aleshka es una joven de 26 años de edad, tiene una piel resplandeciente y de una tez blanca, generalmente lleva un aspecto cansado, con ojeras marcadas. Sus ojos son verdes y su cabellera es roja debido a los tintes que acostumbra comprarse en el supermercado. Tiene una altura de 1.75 cm, suele ser imponente por su alargada figura.
PERSONALIDAD: Debido a la experiencias vividas en su pasado y el tener que vivir en una nueva ciudad desde pequeña, Aleshka presenta una personalidad introvertida, no suele tener muchos amigos, sólo algunos muy cercanos. Es una mujer desafiante, de las que sabes que se ganan la vida a toda costa. Tiene un carácter fuerte y explosivo, nunca sabes bien qué es lo que ocurre por su cabeza. Fuera de eso, tiene una valentía y un corazón grande, muy digno de su sangre.