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El patrón entendió rápido el código y se fue hacia un contenedor que tenia detrás de él junto con 2 ayudantes, forzó la cerradura hasta abrirla y sacó 3 cajas de madera, de tamaño considerable, y las dejó en el suelo junto a los chicos.
-Su cargamento, señor Myrkolovich...- dijo el Patrón con voz grave y rajada.
Los chicos quedaron observando las cajas y a los trabajadores de ese barco, todo parecía normal.
-¿Sabe que portan esas cajas?.- dijo Mosku observando al Patrón.
-No poseo esa información.- concluyó en tono seco y tajante.
Mosku giró su cara levemente mirando a sus chicos con el dinero y les hizo un gesto para que entregasen las bolsas al Patrón. Ellos entendieron la señal, entregando estas bolsas y recogiendo las cajas del suelo, que parecían realmente pesadas.
-Gracias por todo Patrón.- dijo Mosku observándolo.
El hombre no hizo ningún gesto de devolver el agradecimiento, ni una palaba salió por su boca. El cruce de miradas entre los allí presentes aguantó unos segundos más, hasta que Mosku dijo a los chicos de retirarse. El ambiente estaba tenso, se podía oler en sus rostros, pero el intercambio estaba hecho.
Con cautela bajaron del carguero con esas pesadas cajas, mientras los chicos que no llevaban cajas cubrían al grupo con un par de armas de corto alcance.
Los chicos metieron el cargamento en las camionetas y salieron del lugar rápidamente, dirigiéndose a uno de los pisos francos que Mosku poseía. El camino fue tranquilo, los chicos dieron un rodeo a la ciudad por carreteras secundarias, mal iluminadas y poco transitadas. Todos querían saber que llevaban dentro esas cajas pesadas, pero aun debían llegar a un lugar seguro para verlo.
Al fin llegaron, un par de chicos se bajaron a ver la zona, buscando el menor movimiento de personas por los alrededores. Tras acotar la zona y dar luz verde los chicos sacaron las cajas y con cuidado las subieron al piso. Una vez dentro los chicos cogieron una palanca y forzaron las cajas. Todas estaban bien selladas y su interior estaba lleno de perlas EPS, para aislar el cargamento de golpes o humedades. Cuando al fin consiguieron abrir la primera caja todos quedaron sorprendidos, excepto Mosku del cual brotó una delicada sonrisa de su rostro.
Los chicos preguntaron a Mosku de donde había conseguido esa mercancía, el solo respondió con un -Tuve otra vida antes de llegar aquí.- acabó soltando una carcajada para continuar abriendo el resto de cajas.
El cargamento era enorme, su tío había conseguido meter por carguero pesado saltando aduanas un arsenal de armas para los chicos, esos juguetitos les iban a servir mucho para los planes que Mosku tenia a futuro en esa ciudad. Pero una vez que todas las armas y cargadores habían sido colocados y contabilizados Eme encontró algo en el fondo de una caja, Era una cajita mas pequeña, esta de chapa y con un logo en la tapa. Una daga atravesando los 4 ases de la baraja estadounidense. Al ver esto, Mosku rápidamente entendió realmente de donde venia todo ese cargamento. Abrió la caja y encontró 2 objetos, una carta y una mascara.
De Mosku empezaron a brotar unas pequeñas lagrimas de sus ojos. Rápidamente los chicos preguntaron si estaba bien, y él entre lagrimas les invitó a salir del piso y dejarlo solo...
...continuará BIMACORP
Santiago Rodriguez (Sugus)
Un chico de 25 años, con una dura infancia alterada por la bebida y las drogas, se va de casa a la edad de 16 años, para alejarse de esos ámbitos y empieza a trabajar para pagarse sus cosas, además empieza a estudiar música y se hace Dj, viajando a Londres para trabajar profesionalmente de ello. Allí empieza a lloverle el dinero, y por desgracia sigue los pasos de sus padres. Las drogas lo atrapan y se ve bastante perjudicado, pero por suerte se da cuenta a tiempo y ayudado por psicólogos sale de esas malas adicciones. Para olvidar esa fase de su vida, hace un nuevo cambio de aires y elige Los Santos para sus nuevas andaduras. Allí empieza con un trabajo nocturno de repetidor y conoce a una chica que también trabaja en su turno, llamada Judith. Allí se conocen y hacen buenas amistades, tanto que piensan en planes de futuro y en dejar ese trabajo, y elegir otro mejor remunerado para comprar una vivienda en esta ciudad, ya que vivían en habitaciones sucias de motel. Consiguen un trabajo en una mina del norte y allí conocen a Morlan, un chico que les ofrece una familia a la que pertenecer y con la que ganar más dinero aun. Es contratado en BIMACORP como mecánico en el Taller Trevor Customs.
Ndadu Kiara (Negro)
Ndadu, o mejor conocido por su gente como "Negro" tuvo una infancia algo delicada al perder a su padre a la temprana edad de 6 años, vivió con su madre y jugando a futbol hasta los 12 años, cuando centró su vida en estudiar. Anduvo estudiando y trabajando para llevar dinero a su casa hasta los 22 años, donde su vida da otro giro inesperado, su madre y Negro se ve solo. Por suerte, el chico recibe una llamada de un buen amigo, Guilliman Jarton, que le invita a viajar a nuevos horizontes para olvidar su pasado, ahí es donde coge un vuelo a Los Santos. Recién llegado, Ndadu contacta con Guilliman el cual le presta un techo donde dormir y le busca un trabajo en una mina que hay al norte. Allí hacen buenos amigos, uno de ellos Morlan, apodado "Trucho", el cual le brinda trabajar con él, en un Grupo Organizado con cierta repercusión en Los Santos.
Morlan Carrion (Trucho)
Morlan es un chico de 27 años nacido en suiza, con una infancia buena, ya que sus padres lo cuidaron siempre, y lo llevaron por el buen camino, siempre tuvo comida y techo gracias a ellos. Después de entrar a la escuela con edad adolescente, empieza a estudiar informática, ya que es un mundo que le fascina, y conoce a unos amigos que le proponen gracias a sus dotes colaborar con ellos en algo grandioso. Morlan escucha la propuesta y accede. Robar un gran banco Suizo, él seria la pieza clave para entrar y salir sin ser vistos, utilizando un programa creado por él mismo a la temprana edad de 18 años. Por desgracia, ese golpe falló a causa de la inexperiencia, y él junto con su grupo son llevados a prisión. Aquel suceso es escuchado en todas las televisiones del Pais, incluso en los periódicos, y los chicos se comen 7 años de cárcel. Después de salir de cárcel, retoma una vida más tranquila, alejado aparentemente del ambiente delictivo, pero la sociedad lo conoce, y lo juzga por sus actos pasados, de este manera y tras meditarlo, decide salir de suiza, y volar a Los Santos para tomar aires nuevos. Una vez llegado a los santos busca un trabajo a tiempo parcial en una mina de carbón, y allí empieza a conocer gente, va observando a todas y cada una de las personas que viven en esa ciudad, alejándose de las calles y la delincuencia, y buscando hacer amistades con las altas esferas. Tras mucho tiempo indagando en la ciudad, descubre una Alta Jerarquía de personas que tienen un conglomerado empresarial, a vista de los ciudadanos unos grandes empresarios, pero, a vista de Morlan algo más. Sigue investigando a esa Corporación hasta que descubre realmente lo que andaba buscando. Delincuencia pero a alto nivel.
Un día cualquiera, caminando por calles oscuras y silenciosas ve a un individuo apoyado en una pared, Morlan lo observa en la lejanía, y se da cuenta de que es un miembro de BIMACORP, mantiene la vigilancia, hasta que decide acercarse. Ese chico se presenta como TJ, y Morlan tras hablar un poco con él, le suelta unas pinceladas de la información que tiene sobre TJ y BIMACORP, el principio TJ lo niega todo, tras enseñarle pruebas físicas de las investigaciones informáticas que Morlan obtuvo durante el tiempo que lleva en la ciudad, TJ queda retractado de sus palabras, claramente, Morlan conocía mucha información de BIMACORP, del trafico de Armas y del lavado de dinero que la supuesta "Corporación" estaba haciendo.
TJ llama rápido a su jefe, y le comenta la situación, a lo cual, el jefe responde rápidamente "Lo quiero dentro". TJ cuelga el teléfono y con sutileza le dice a Morlan si no le gustaría pertenecer a un puesto importante en el conglomerado empresarial de BIMACORP, a lo que él responde con un "-Si, pero no estoy solo."
-Padre..., porque, ¿Por qué me haces esto?.- comentaba levemente entre lagrimas agarrando la mascara.
Seguidamente agarró la carta y con cuidado la abrió.
Querido Mosku Se que nuestra relación nunca fue fácil nuestros caracteres siempre chocaron pero yo siempre voy a ser tu padre y te voy a querer como tal, solo espero que sepas perdonar todos los fallos que tiene un hombre que ama y protege a su hijo.
Con esto que te mando entenderás, que mi tiempo en lo más alto esta terminando Ahora tu deberás seguir el legado y yo confio en que lo hagas mejor que yo. Fdo: Yakov Myrkolovich
De Mosku no paraban de brotar lagrimas, la habitación estaba sola, los chicos habían marchado fuera, entonces cogió la mascara y la carta y se recostó sobre un sofá que había en este piso franco. Eme estaba algo consternado, él sabia que esto llegaría algún día, su padre ya tenia una edad, y mantenerse a la cabeza de aquella mafia rusa cada vez le resultaba más difícil; su ultima voluntad fue regalar a su hijo, con el cual siempre había tenido problemas, su mascara de mafioso, un gesto que tenia un mensaje. Cuando en la familia un cabecilla cedía su mascara, significaba ceder todos sus deberes y derechos a la persona que se la otorgas, algo que Mosku no esperaba recibir por la mala relación que tenían.
Pasaron unas horas y Mosku seguía dándole vueltas a la situación, su mente empezaba a despejarse, y a darse cuenta que realmente su padre le quería, y que todo lo que le había hecho pasar en la juventud de Mosku, habría sido para forjarlo como el hombre que es hoy día.
Levemente se levantó del sofá y abrió la caja de la mascara colocándola en su cabeza, giro levemente su cuerpo hasta llegar a las estantería con el cargamento recién ordenado, emanaba una actitud muy distinta, agarró una de la armas y sacó una foto.
-Padre..., voy a seguir tu legado, no te voy a defraudar, ya lo veras.- dijo en voz baja mientras abría la puerta del piso y salía de allí para juntarse con los chicos.
Jesus Mendo (Oso)
Jesús es un chico de 21 años, llega a Los Santos, para alejarse de la vida que tenia en su ciudad, buscando nuevos aires y nuevas sensaciones. Empezó a buscarse la vida en una pequeña empresa de leñadores, pero pronto dejó ese trabajo, porque un amigo llego a la ciudad, y entre los 2 decidieron emprender y comprar una empresa de seguridad llamada Tree Security. La empresa fue fructífera, hasta el punto de facturar grandes cantidades de dinero. Artos de tanto papeleo, Tayler y Jesus decidieron vender la empresa, y seguidamente buscar otros horizontes. Y ahí conocieron a los dueños de BIMACORP, tras una larga charla sobre empresas, las 2 partes quedaron satisfechos con sus emprendimientos, y BIMACORP les ofreció pertenecer a sus filas por su gran experiencia empresarial.
Tyrice Mosley (TJ)
Tj es un chico de 19 años, dominicano, tranquilo pero con carácter fuerte si se sobrepasan con él o con su gente, vino a Los Santos porque en su pías la situación económica era complica y quería tener un mejor futuro para el y su familia. Llegó a los santos con un amigo, pero su amigo no le gustó la ciudad y marchó a otro lugar, Tj quedó solo en la ciudad y tomo cobijo en una pequeña familia de Grove Street, allí convivio varios años, pero en los barrios siempre hay problemas día a día, y TJ empezó a desilusionarse con las situación que allí se vivía, finalmente la familia de TJ se separó, y él tomó un rumbo más tranquilo, llamando a un viejo amigo. Mosku le cogió el teléfono y estuvieron hablando largo y tendido, Tyrice le contó lo sucedido con su familia, y Eme le propuso un puesto en el Conglomerado empresarial de BIMACORP, empezando como mecánico del taller Trevor Customs.
Era día de hacer la declaración de ganancias de BIMACORP, para entregar el balance a las autoridades pertinentes, Lenna llevaba todo el día trabajando, contabilizando todos los gastos y ganancias de las diferentes empresas.
-Rubio, ¿Cómo estas? Te llamaba para pasarte el balance empresarial de BIMACORP. Ahora les pasaré la informacion a Eme y AD .-comenta Lenna en voz algo ajetreada.
-Hola Lenna, perfecto, pásame la info de Trevor Customs desglosada, y muchas gracias por tu trabajo .-respondió Rubio con tono calmado.
-Un placer como siempre, estamos en contacto Rubio .-comenta Lenna en voz algo ajetreada.
Billy estaba en su apartamento ordenando una cosas mientras se descargaba la información de Trevor Customs. Unos minutos después el móvil sonó, la descarga había finalizado. Billy acabó de colocar su apartamento y cogió su movil verificando la información sobre su empresa Trevor Customs.
{Gastos de Personal }
{Gastos de Material}
{Gastos Totales}
{Ganancias}
Después de un largo tiempo contractando los datos de la empresa, Billy levantó la mirada de su teléfono y soltó una sonrisa mirando por la ventana de su apartamento, el desglose mensual había sido satisfactorio para Trevor Customs y para BIMACORP a su vez.
Como parte de la expansión en el ámbito empresarial y después de un análisis de mercado la organización BIMACORP ha decido abarcar el mercado automotriz con la adquisición de un viejo taller ubicado en La Mesa y tras una inversión en equipos, grúas y uniformes, Trevor Customs ha abierto sus puertas ofreciendo servicios con los más altos estándares de calidad para todo tipo de vehículos de motor terrestre, bajo la administración de Dominik y Fernando, los mecánicos más antiguos de la empresa y mejor cualificados en el área automotriz, garantizando con esto la calidad en el servicio.
Estos 3 amigos de renombre que han iniciado desde lo más bajo, hoy se perfilan como grandes empresarios sumando a Trevor Customs a su grupo de empresas.
Trevor Customs el mejor lugar para consentir tu vehículo y aprovechar todo el poder que tu auto te puede dar.
Ofrecemos servicios de: • Enderezado y pintura • Mecánica rápida • Servicios de Tunning • Servicio de Grúa 24/7 • Reparación y mantenimiento a cualquier tipo de vehículo/motocicleta.
Dominik Jonathan (Gordo)
Dominik era un chico de 21 años de edad, adicto a las patatas fritas, llegó a Los Santos con ganas de encontrar una familia donde estuviese cómodo. Tras su llegada intentó hacer amigos, y encontró un hueco en una empresa de minería, allí pasó sus primeros años, pero aquel trabajo era muy pesado, y quería cambiar de aires.
Un día cualquiera, mientras Dominik tomaba un trago, se acordó de un chico que había conocido en el aeropuerto al llegar a la ciudad, y que había estado trabajando con él varios turnos en la empresa de minería. En ese momento le dio una llamada para conversar con él. Tras varias horas hablando, los 2 llegaron a la conclusión que el trabajo de minero no era para ellos, y tras firmar el despido, regresaron al sur de Los Santos buscando un trabajo más digno, y a poder ser mejor remunerado.
Fernando Bianchi (Rizos)
Fernando era un chico de 23 años, el cual había tenido problemas familiares, y buscaba un escape y una vida nueva en otro lugar, así llegó a Los Santos. Al llegar al Aeropuerto Fernando conoció a un chico llamado Dominik que hicieron buenas migas y se dieron sus números de teléfono por si alguna vez necesitaban algo el uno del otro.
Fernando llegaba de una vida un poco lujoso, gracias a los negocios de su padre, pero un día su vida giró 360 grados, y de tenerlo todo pasó a no tener nada. Una fuerte bronca con su padre lo llevó a desaparecer de su Pais natal, Italia. Al llegar a Los Santos se prometió a él mismo que llegaría más alto que su padre, y le demostraría que no lo necesitaba para nada.
Un día, mientras paseaba tranquilamente por la ciudad recibió una llamada de un antiguo conocido, Dominik.
Los chicos llegaron al sur de la ciudad, buscando un curro decente, estuvieron buscando empresas de seguridad, de taxis, talleres, incluso entrar en algún puesto Gubernamental. Después de una larga búsqueda llegaron a un humilde taller, en el cual pidieron si había alguna vacante para trabajar. El jefe era medio raro, pero ellos querían trabajar en cualquier cosa, así que aceptaron unos contratos, que muy lejos de ser óptimos para subsistir en Los Santos, les serviría para acomodarse y buscar algo mejor a futuro.
Por suerte, a las buenas personas siempre la vida les sonríe, y a estos buenos chicos la vida les sonrió. El día menos pensado, unos empresarios llegaron a dicho taller, ellos venían con ganas de comprar el lugar, y tras hablar cara a cara con Dominik y Fernando llegaron a la conclusión de que esos chicos no merecían esos salarios tan pobres y las jornadas laborales tan largas. Se reunieron con el dueño de aquel taller, y le hicieron una oferta que no pudo rechazar.
En ese momento la empresa cambió de manos, y en contrato se mantuvo la plantilla actual, así los chicos mantuvieron sus puestos de trabajos y mejoraron sus salarios.
Arthur Dume (La Mente)
Joven de 28 años, procedente de Republica Dominicana, llegado a los Santos con la idea de comenzar una nueva vida, rebosante de ganas empieza trabajando en una pequeña empresa de Seguridad por sus habilidades e historial militar, bien formado consigue un buen puesto en dicha empresa y conoce a mucha gente, una de ellas, Mosku Myrkolovich con quien forja una buena amistad, pasa el tiempo y se hacen casi inseparables. Tras el paso de los años en la ciudad, Arthur le propone a su jefe la entrada de su amigo a la empresa de seguridad, la cual se hace efectiva rápidamente.
Mosku Myrkolovich (El Ejecutor)
Hombre adinerado, de 28 años, llega a la ciudad, con ganas de convertirse en alguien importante, pagado por la muerte de su padre, llega con un buen pellizco bajo el brazo a Los Santos; donde quiere continuar el imperio que un día su padre tuvo. Rápidamente aprende a moverse por la ciudad y a ganarse amigos, uno de ellos Arthur, el cual lo invita a trabajar con él. Pasan los años y conocen por casualidad a un hombre que les cae en gracia, un tal Billy, trabajando juntos en sus labores secundarios empiezan a pensar en sus futuros bajo la misma idea de llegar a ser importantes en la ciudad.
Billy Sallow (El Legal)
Hombre de 38 años, con un pasado incierto, y renegado de una vida que no quería, sale de su ciudad natal para buscar un lugar tranquilo. Llega a Los Santos con una mentalidad fría y buscando un trabajo humilde, el cual encuentra. CoolExpresMotors fue su primer contrato, trabajó de mecánico un par de años, mejorando su experiencia en el ámbito, pero el dinero no le daba para vivir, y buscó un segundo trabajo. En su trabajo secundario conoció a 2 de los que ahora llamaría sus mejores amigos, Mosku y Arthur. Ellos 3 salían muchas veces juntos de fiestas a bares y burdeles, aunque a Billy no le gustaba frecuentar esos lugares, se sentía a gusto con sus amigos.
Un tranquilo día, los 3 muchachos salieron a tomar algo, tanto Mosku como Arthur se sentían un poco cansados de los tratos en su empresa de Seguridad, y Billy estaba buscando algo más grande que trabajar para un jefe de taller. Después de varias copas y muchas risas, a alguien le surgió la brillante idea de montar una sociedad entre los 3 amigos. Y así fue. Juntos crearon BIMACORP, con la premisa de montar un conglomerado empresarial por todo Los Santos.
BIMACORP
Hace mucho 3 jóvenes luchadores y con ganas de emprendimiento se encontraron en una cuidad llamada los Santos, poco a poco fueron forjando una gran amistad, compartían ideales de vida entre otras cosas. Tras unos años su amistad se fue cerrando más y más, hasta el punto en el que se hicieron inseparables. Un domingo lluvioso, estaban los 3 en los aparcamientos de Pillbox, hablando un poco de la vida, y de lo que habían sufrido hasta llegar al lugar donde estaban. En ese momento a Billy le surgió una idea, la cual sus 2 amigos no dudaron en ningún momento, la idea era clara, ser socios, y montar el mayor imperio en los Santos.
Tras varios días debatiendo, se montó una pequeña empresa llamada "Billy Boys" la cual era encabezada por los 3 socios principales, Arthur, Mosku y Billy.
Digamos que sus comienzos fueron complicados, y su primer gran negocio fue trabajar como basureros, empezaron desde bien abajo, pero luchando día a día por llegar a las altas esferas. Desafortunadamente, montaron una empresa privada de reciclaje, que pronto el gobierno echó abajo, por falta de permisos.
Ellos estuvieron un tiempo cabizbajos, ya que habían luchado tanto por montar su primera empresa que pronto se fue al traste. Tras este sucesos, ellos quedaron apagados física y mentalmente. Volvieron a sus simples vidas, trabajando en empresas pequeñas, cobrando sueldos bastante tristes.
Tras un largo tiempo, desaparecidos como empresarios, el destino los volvió a juntar en una cafetería del norte; aquel momento fue muy emotivo, 3 grandes amigos reunidos nuevamente en un mismo lugar. Estos pasaron la tarde entera hablando de sus vidas, y de sus nuevas ideas de negocios.
El primer socio, Arthur, habría estado trabajando duramente como camionero en todo este tiempo, su trabajo era muy sacrificado y con largas jornadas laborales, pero habría ganado algo, una gran soltura a la hora de hablar con la gente, negociar precios o incluso mediar entre disputas.
Por otra parte, Moskú pasó sus días de bar en bar, frecuentando burdeles y gastando todo su dinero en alcohol y mujeres, claramente una vida hedonista. Por suerte, gracias a ese estilo de vida, consiguió rodearse de personas de distintas clases sociales, y hacer grandes amigos, fieles y no tan fieles.
Y para finalizar, Billy, que había intentado limpiar su imagen empresarial en la ciudad, hablando con el gobierno y abogacía para empezar a emprender nuevamente, aunque por desgracia no tenia la solvencia monetaria para empezar.
Después de una charla larga y tendida, tanto Arthur como Mosku se vieron animados por el nuevo proyecto empresarial, y entre los 3 decidieron nuevamente empezar de cero, creando una nueva Organización, la cual seria llamada BIMACORP en honor a los 3 fundadores.
-Me gustaría tener una bonita casa con piscina y vistas a la ciudad, con una gran cochera y un patio gigante para que mis perros correteen felices .-dijo Arthur mientras miraba por la ventanilla del coche.
-Mmmm, y si buscamos un lugar así para vivir, yo también estoy arto de vivir en Pillbox, ¿Qué dices Rubio? .-comentó Eme que iba montado de copiloto mientras giraba su cabeza a un lado mirando a Billy que era el que conducia esta vez.
-Lo vemos después de la empresa si quieren, también creo que puede ser buena idea, salir de ese estercolero llamado Pillbox. .-comentó Billy de manera seria y sosegada sin quitar la mirada de la carretera.
-Llegamos, ¿que os parece? .-dijo Moskú mirando a los chicos.
El lugar era enorme, ya se apreciaba desde fuera, una de los embarcadores de Los Santos, con un gran potencial. A primera vista los chicos quedaron sorprendidos, pero aun tenían que entrar al interior y recorrer todas las instalaciones.
-Hola Bernard, veníamos a ver el lugar, hablamos con el gobierno y nos dio luz verde para visitar las instalaciones. .-dijo Billy mientras se rascaba la nariz y miraba a la cara a Bernard.
-Tu eres Billy, ¿Verdad? Recibí una llamada del Gobierno hace media hora, pueden pasar sin problemas .-respondió el chico de seguridad mientras abría las puertas de manera remota.
Una vez dentro los chicos anduvieron por cada uno de los rincones del lugar, valorando el lugar, la ubicación, la superficie empresarial y todo los posibles trabajos que se podrían hacer allí. Los chicos se reunieron en torno a una oficina central que tenia el lugar y debatieron las posibilidades que allí había para ampliar el conglomerado empresarial.
Tras un largo debate a 3, llegaron a la conclusión de que aquel lugar y una empresa de trasporte seria una combinación estupenda para seguir su crecimiento. Así Moskú llamó a Lenna, y le confirmó que el proyecto seguía adelante.
Los chicos habían conseguido formar legalmente la empresa de Trasporte, con el Nombre de BimaExpress, y habían acordado con el gobierno trabajar en las instalaciones del Pier400. Pronto acomodaron la oficina central para las necesidades de BimaExpress, comprando un par de pantallas de ordenador, mesas de escritorio, muebles para guardar ficheros de trasporte y algunas cosas más para el funcionamiento correcto de la empresa.
Lenna aceleró los tramites y consiguió que la empresa quedase consolidada, habló con una par de clientes potenciales, como dueños de licorerías y alguna tiendas de ropa urbana, cerrando acuerdos con ellos para el trasporte exclusivo con BimaExpress; de igual manera también pensó en montar un pequeño servicio de taxis, pero algo "ligth", no quería tener 100 taxis rondando por la ciudad, si no algo discreto y exclusivo.
Eme fue quien tomó el liderazgo de esta empresa, pasándose horas y horas en la oficina hasta que todo empezó a funcionar de manera fluida.
Billy, un viejo conocido en los santos, tuvo que irse de la ciudad de manera extraña, nunca explicó el motivo, pero dejó mucho atrás, empresas, amigos, propiedades, y algún que otro cadáver.
Anduvo un tiempo en su ciudad natal, con su familia, y después se fue a Japón. Una vez allí se dejó influenciar por algunos moteros de la zona, mientras trabajaba aquellas 12 horas interminables en los bares de carretera.
Tras 4 años en Japón, Billy recibió una llamada, era su madre.
- Bill, el abuelo...
Billy pronto entendió y dejó el lugar para volver a su ciudad. Una vez allí, este se despidió debidamente de su abuelo, y leyó la carta que el mismo le había dejado antes de su muerte. Esta decía que le dejaba una moto que tuvo durante un tiempo antes de morir, y que la cuidase mucho.
Rápidamente Billy cogió un par de mudas de ropa y una mochila y se largó nuevamente para los Santos, algo en su cabeza había cambiado.
Una vez en los Santos y tras 6 horas de vuelo, llamó al capitán del carguero que traía el regalo que su abuelo le dejó.
-James, ¿que le queda al barco para llegar?
- En 2 horas estaré en el puerto.
- Perfecto, te veo allí.
Billy llamó a un taxi, y lo dejó en el puerto, esperando que el carguero llegase con su moto.
Ya estaba allí, la moto que su abuelo le había regalado, y que con tanto cariño la esperaba. Ayudo a descargar las mercancías al Capitán del barco y posteriormente abrió su preciado tesoro.
Claramente era una joya que cuidaría con mucho cariño. La cual arrancó rápido y empezó a probar, al parecer la moto funcionaba bien, pero le faltaba personalizarla a su estilo. Así que fue a un taller que hace mucho tiempo fue suyo. Allí lo recibieron con los brazos abiertos, aunque los trabajadores habían cambiado, y ya no lo conocían como antaño. De igual manera, Billy dejó su moto a un mecánico de Trevor Custom para que la modificase al gusto, y tras varios días de trabajo y cambios de diseño, al final consiguió el resultado que el quería.
Una vez terminada agradeció el trabajo al mecánico y salió a pasear por las calles de los Santos. Claramente se notaba que los años en Japón le habían influenciado para esas modificaciones estéticas, y él a su vez, quería influenciar a los Santos y a los motoristas de esta Ciudad. Empezó a pasear por las calles, a asistir a eventos de Autos, y cada vez era más conocido, hasta que se empezó a crear un movimiento. La llamada Black Line.
La Black Line fue tomando fuerza en los santos, influenciada por el Bōsōzoku japonés, pero aún eran pocos la gente que se atrevía a entrar con todo sus pros y contras en dicho Club Motero, ya que este club tomaba las normas un poco a su gusto, y tenia unas reglas algo favorables hacia la muerte. Sus integrantes nunca llevaban casco, y solían no respetar semáforos, ni señales de trafico. Manejaban a altas velocidades, por disfrute, y les encantaba juntarse para beber Whisky.
Primeramente empezaron a moverse por toda la ciudad, pero fueron limitando su lugar a las zonas de Pacific Bluffs donde encontraron su lugar. Se dejaban ver en las noches, a gran velocidad por la autovía de Great Ocean Highway y aparcaban para beber y conversar en los Parking públicos de la zona. Tenían aquel lugar como su zona protegida, donde nadie debería sobrepasarse para no tener problemas.
|-Black Line-| Normativa(IC). - Tener entre 18 y 28 años - Poseer una moto OnRoad - No llevar nunca casco - No tener carnet de motocicleta en vigor. - Tener más de 9 años en la ciudad y 4 conduciendo motos. - Nunca llevar el puño a medio gas.
Billy llegó al taller tranquilamente, con el coche de su infancia, no paraba de mirarlo, cada detalle le hacia regresar 20 años atrás, cuando aun estaba sacándose el carnet y su padre le decía que hasta que no lo tuviera no le dejaría el coche.
Tras cerrar el taller, metió su coche en el taller, tenia toda la noche por delante, así que empezó con lo básico. Cambio de líquidos, revisión de manguitos y latiguillos, revisión del cableado e iluminación. Una vez revisado todo, empezó con la artillería pesada, llevó el coche a rodillos, para comprobar la potencia que estaba dando aquel viejo motor.
Billy arrancó el 4 cilindros en línea, el sonido era lineal, parecía no tener falla. Así que agarró la palanca de cambios y empezó a meter machas. Primera..., Segunda..., Tercera...
Aquel motor rugía como antaño..., Cuarta..., y el coche petardeaba en el cambio de marcha con un estruendo horrible.
-¡Quinta..., y al corte!.- gritaba Billy emocionado mirando el marcador de velocidad a 180Km/h.
Poco a poco, Billy fue soltando el acelerador y reduciendo las marchas, hasta dejarlo a ralentí y en punto muerto.
-Veamos esos resultados.
Billy se acercó a la maquina y miró los resultados del vehículo, los cuales no eran muy alentadores. 195 caballos y 220Nm.
-Esto no vale para nada, habrá que cambiar este viejo motor atmosférico, por algún otro que le de una patada al asfalto.
Billy trajo una grúa portátil de 500kg de carga máxima y enganchó el motor. Empezó a soltar los agarres de motor, y todo el cableado y las tuberías necesarias para que el motor saliese. Una vez fuera lo dejó a un lado, y se metió al almacén en busca de un motor acorde a ese chasis espectacular. Anduvo buscando unas cuantas horas, hasta que eligió una al que le tenía mucho cariño. Un 426 Hemi, un motor V8, de la familia americana, con una toma de aire sobredimensionada y con variador de flujo en el acelerador. Toda una obra de ingeniería, de 7.0 litros y una potencia en papeles de 554 caballos y 670 Nm de par motor.
Billy sacó el motor nuevo con otra grúa portátil y lo colocó dentro del vano motor, acoplando y conectando caja de cambios, filtros y maguitos para esta nueva bestia. Pasó toda la noche trabajando en ello, antes de que amaneciese le dio las ultimas pinceladas, y lo sacó del taller. No quería que sus chicos se enteraran de lo que tenia entre manos.
Tras el gran crecimiento de Trevor Customs, y la necesidad de dar a sus nuevos mecánicos todas las herramientas necesarias, Billy hizo una llamada al Krapea. Tras una larga conversación, encargó un nuevo banco de trabajo, de 4 cajones, cargado de herramientas de todo tipo, martillos, llaves de tubo, llaves planas, útiles especiales para ciertos vehículos de alta gama y muchas más cosas.
Varios días después, los trabajadores del Krapea llegaron al taller y colocaron todo lo solicitado donde el Dueño Billy dijo. Ahora los chicos podrían arreglar más coches y con herramientas más profesionales, dándole al cliente un mejor servicio.
Los problemas no hay que buscarlos, llegan solos, y así es, hoy le tocó a Trevor Customs. Un desafortunado encuentro de uno de nuestros mecánicos con la LSPD que acabó con el muchacho preso un par de días, hasta que se aclaró todo.
Por desgracia, un ladrón de tiendas fue pillado por la LSPD, y empezó un persecución con la mala suerte de acabar en las puertas del taller, chocándose dicho individuo contra una farola. La LSPD rápidamente redujo al delincuente y montó un perímetro.
En ese mismo instante, Gustavo, uno de nuestros mecánicos llegaba al taller a trabajar. El joven mecánico acababa de comprar un automóvil nuevo hace poco más de una semana, y aun no le tenia bien tomadas las medidas. De esta manera, cuando Gustavo se proponía a girar para entrar al taller, rozó con su coche el de un oficial. Ahí detonó todo.
La LSPD lo detuvo y le hizo unas preguntas, pero al parecer querían cazarlo. Le culparon de conducción temeraria, y alteración del orden publico. Rápidamente lo esposaron, y aunque tanto Billy, el dueño del taller, como Dominik, el encargado, se quejaron de lo allí ocurrido y pidieron explicaciones, nadie les respondió.
Al final, el mecánico explicó su versión en comisaria, y los agentes entraron en razón, todo quedó en un aviso, y una amonestación simple.
La ciudad se está llenando de fanáticos de las carrera y el Tuning, y a Trevor Customs hoy le llegó un cliente así. El hombre de edad temprana traía un bonito V-STR, sencillo pero bonito. El joven quería un bodykit nuevo, colas de escape Fukaru, y un vinilo sencillo pero agresivo.
Los mecánicos fueron al almacén y trajeron todo lo necesario para poder ponerse a trabajar. Empezaron retirando todos los paragolpes de serie del vehículo y empezaron a instalar el bodykit. Después montaron la cola de escape, de marca Fukaru, lo mejorcito del mercado. Para acabar los chicos montaron un vinilo minimalista en tonos grises y blancos:
Cuando el cliente vio como había quedado, felicitó a los mecánicos.
Hoy el día estaba siendo tranquilo hasta que llegó él. Un Japonés, con un Futo precioso, al parecer había tenido un choque con un taxi, y vino maldiciendo a todos los taxistas de la ciudad. Después de un rato se calmó un poco, y los mecánicos empezaron a reparar su vehículo colocando piezas de la mejor calidad.
Luego salieron a hablar un poco para relajar tensiones, compartieron opiniones sobre los coches japoneses, comparando motores, marcas y modelos.
Después de una larga hora hablando de automóviles, los chicos metieron sus vehículos en el taller, para hacerle unos reglajes, y probar el PAR y Potencia de cada uno. Además hicieron una revisión de los líquidos y filtros.
Estando en la oficina, ajustando cuentas empresariales, y cerrando y archivando contratos, Billy se puso a pensar, cual seria una buena manera de seguir creciendo empresarialmente, después de un rato dándole al coco le surgió una idea.
¿Porqué no ir a la LSES, y hablar con ellos sobre un nuevo convenio?
Ellos tienen mucho movimiento durante el día, y además una buena flota de ambulancias, así que seria buena idea intentar con ellos un acuerdo para el mantenimiento de sus vehículos.
Billy agarró su chaqueta, y se fue hacia el hospital de Pillbox.
Entro dentro, y preguntó por el Director del Hospital, el cual no se encontraba en ese momento. Así que bajó a atenderle el Subdirector General Carlos Fernández. Este le invitó a subir a su despacho para dialogar, y Billy le planteó la propuesta, Carlos lo pensó un par de minutos y después aceptó. Así que sacaron un informe y allí mismo formalizaron el convenio.
Una vez formalizado el convenio, los 2 estrecharon sus manos y el Subdirector lo acompañó gustosamente a la salida.
Hoy tuvimos una visita inesperada, ni mas ni menos que Benny Larsson, uno de los Directores y Jefe de Prensa de la revista Nitro junto a su socio Matthew Holloway. Los chicos fueron muy simpáticos, y nos hablaron sobre la Revista, y sobre la posibilidad de hacer un par de paginas de Trevor Customs para su revista.
Después de una larga conversación Billy y los chicos de la Revista llegaron un acuerdo para publicar un par de paginas sobre el taller. Y después Billy, en un gesto de generosidad reparó y modificó el auto de Benny, para que todo fuese mejor.
Un magnifico ejemplar de Penumbra FF, con un color rojo fuerte y unas llantas de 18 pulgadas que se robaban todas las miradas.
Los mecánicos de Billy empezaron a trabajar en el auto, un par de aprietes en los paragolpes, el cambio de aceite y filtros, por otros de mayor calidad, y un ajuste en el reglaje de centralita, para darle al motor algo más de pegada. Después de todos los arreglos, Benny y Matthew estrecharon la mano con Billy, y salieron realmente contentos del taller.
Otro servicio bien hecho.
Hoy llego un caballero afroamericano, que llevaba poco en la ciudad, nos contó que acababa de comprar un coche de segundo mano a un viejo anciano, y aparentemente estaba todo bien, pero cuando empezó a apretarle el coche se le calentaba. Entonces recurrió a talleres Trevor Customs.
El mecánico de guardia abrió el capó y empezó a trabajar en el auto. Tras varias horas al final se llegó a la conclusión de que el anciano le echaba agua en vez de anticongelante al vehículo, por lo que el cliente tuvo que cambiar todo el sistema de refrigeración.
Hoy llegó una sobre al Taller Trevor Customs. Billy que estaba en la oficina del taller haciendo unos papeleos la recibió y miró el remite.
-Sandra García, que raro, mi madre escribiéndome por correo ordinario, veamos que trae.-comentó en voz leve mientras sacaba una navaja para abrir el sobre.
El sobre era pequeño, y al abrirlo, Billy se encontró con una carta y una cajita. Agarró la carta primeramente y se puso a leer.
Hola cariño, soy tu madre María. Quería escribirte por aquí para decirte que tu padre por fin se jubiló y dejamos el taller en manos de Bryan, aquel chico aprendió mucho y ahora llevara el taller.
Por otra parte, tu hermano Bruce, ahora se dedica a la competición automovilística. Logró salir del mundo en el que se movía, y ahora representa a un equipo de carreras como piloto oficial.
Y bueno, para acabar Papá y yo, te hemos mandado un pequeño regalo. ¿Te acuerdas del Zion Classic de Papá? Si aquel con el que aprendiste a conducir. y que tanto te gustaba de joven. Pues ahora es tuyo, espero que lo disfrutes como lo hacías de pequeño. En el paquete están las llaves, debería llegar a puerto en unos días.
Con todo el cariño del mundo, de tu Mami y tu Papi.
Billy se emocionó leyendo la carta, y a punto estuvo de saltarse una lagrima de sus ojos, pero aguantó la compostura. Entonces guardó la carta de nuevo en el sobre dejándola sobre la mesa, y abrió la caja de madera. Allí dentro estaban, las llaves del antiguo Zion de su padre, con el que tanto aprendió.
Un par de días después, fue al embarcadero del Sur, donde le esperada el regalo familiar. Habló con el encargado del buque donde sabia que llegaba su mercancía, y tras varios minutos de papeleos el Jefe del barco bajó su Zion Classic.
Billy abrió la puerta con cuidado y se montó en él. Estaba tal cual lo recordaba, parecía que los años no habían pasado para el coche. Metió la llave y...
-A la primera, este carro no para de sorprenderme.- comentó en voz baja mientras en su rostro se dibujaba una sonrisa.
Lentamente metió primera, y se lo llevó al taller donde le haría una puesta a punto y reglaje del mismo.