Espinosa Martínez



  • Ramoncín Espinosa era un niño normal, alegre y generoso. Venía de una familia de clase media-alta, con buenos ingresos mensuales ya que su padre formaba parte de una red de narcotráfico y contrabando. Cuando Ramoncín tenía 14 años encontraron a su madre muerta. Todo apuntaba a que había sido por causas naturales, pero el padre de Ramoncín sabía que todo había sido un ajuste de cuentas por parte de una banda rival y la muerte de su mujer había sido provocada. El padre buscó a los miembros de la banda y se reunió con ellos en un antiguo almacén, donde iba a haber un tiroteo de vida o muerte. El padre fue asesinado con un disparo en la cabeza. Ramoncín se entero de la muerte de su padre y su actitud cambió completamente, se volvió agresivo y empezó a ganarse la vida con trabajos sucios como sicario, camello, traficante de armas… Unos meses después de la muerte de su padre los compañeros de la banda de su padre le dieron a Ramoncín una carta que había sido escrita por el días antes de morir, donde constaba toda la verdad sobre la muerte de su madre y el por que del tiroteo que se iba a producir. Tras leer esa carta Ramoncín quiso vengar a sus padres. Fue buscando uno a uno a cada miembro de la banda rival para asesinarlos. Dejó al presidente de la banda para el final, lo capturó y lo torturó para finalmente matarlo de un disparo en la cabeza con una bala 9mm, la misma que había matado a su padre. Después de esto Ramoncín dejó los trabajos sucios por un tiempo, hasta que recibió la llamada de su amigo Julián, el cual vivía en otra ciudad y necesitaba ayuda urgente. Alberto hizo las maletas y se fue, intentando seguir los pasos de su padre.


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