Alika Bloods



  • Alika Blood creció en barrios bajos de Los Santos entre patrullas rotas, grafitis y el ruido constante de sirenas en el aire. En barrios bajos nadie te enseña a confiar, solo a moverte rápido y a no dejar que te vean sangrar. Desde chica aprendió a improvisar con lo que hubiera a mano: vendas hechas de camisetas viejas, alcohol robado de alguna cantina, y nervios de acero.

    Tiene fama de fría, pero los que la conocen saben que, cuando todo se va al carajo, Alika es la que mantiene la calma. No le importa si sos poli, pandillero o civil ,si respirás, te va a mantener con vida. Habla poco, actúa rápido y siempre parece tener un plan escondido detrás de esa mirada cansada.

    Ahora busca entrar como paramédica. No por la gloria ni por las medallas, sino porque alguien tiene que hacerlo, y nadie en la calle lo hace mejor que ella.


Accede para responder