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Joe Quintana, joven nacido el 10 de mayo de 1996. Quintana es un chico de Iquique, ubicado al norte de Chile, en Latinoamérica.Es un joven bastante alto, tiene una altura de 1.85m aproximadamente, su color de piel es trigueñoy su pelo es castañooscuro. Dentro de su grupo familiar estaba su hermana FernandaQuintana, su madre Rosa Toledoy su padre JoshQuintana.El padre de Joe era un carpinteromuy exitoso de la zona, sus muebles eran obras de arte que brillaban antelos ojos de la gente. Por otro lado, su madre Rosa confeccionaba las más hermosas artesanías, manejaba el hilo como si fuese una extremidad de su cuerpo. FinalmenteFernanda, una chica la cual todo el barrio la admiraba, tenía un corazón tremendo, ayudaba a la gente que lo necesitaba y siempre pensaba en los demás. Todo iba bien en la vida de Joe, era un alumno ejemplar en la escuela, en el cual se podía confiar. Pero lamentablemente cambió todo, en la tarde de 15 de abril de 2006.
Joe venía llegando de la escuela, un recorrido no muy largo, de unos 30 minutos por el paseo Baquedano. A unas 3 cuadras de su casa, el cielo se nubló y cambió a color rojo. La casa había explotado, de un segundo a otro, toda la vida de Joe se arruinó, su padre, madre y hermana se encontraban en el lugar de la explosión. Empujado por la onda expansiva, Quintana se levanta rápidamente para ir a buscarlos, con lágrimas en sus mejillas y restos de ceniza en su cara. Ya estando a unos cuantos metros de su hogar, pudo ver como todo era quemado por las llamas, no escuchaba nada, ni a su madre, ni a su padre, ni a su hermana. Todos habían fallecido debido a la explosión.
Debido a esto Joe fue enviado a un orfanato, el cual cambió totalmente la visión de él. En el orfanato conoció a varios chicos, varias historias eran contadas en esos pasillos fríos y llenos de pensamientos negativos. Para Quintana vivir en ese orfanato fue un arma de doble filo, al conocer a tantos chicos, obtuvo mucha sabiduría, desde como hacer un cuchillo con latas y cosas cotidianas, hasta como vivir en la calle. Pero por otro lado, lo peor era la gente que los cuidaba, si es que se les pudiese llamar gente a esos monstruos.
Quintana vivió una infancia muy difícil, en la que a los niños los violaban, les pegaban, los castigaban e incluso a algunos los mataban. Niños abandonados por la sociedad de los cuales nadie se pregunta, es por esto que Joe a los catorce años decide escaparse junto a otros niños.
El escape fue un éxito, pero no a la primera vez y ahí fue cuando Joe entendió lo que era vivir en el infierno. Al fallar la primera vez a Quintana lo azotaron con cuerdas, amarradas con pequeños clavos, los cuales, al azotar, rajaban la espalda de Quintana. Lo dejaban encerrado durante horas en un cuarto oscuro.
Es por esto que, en el segundo intento Quintana dio todo de sí mismo, logrando escapar con unos cuantos compañeros. He aquí cuando la historia de Joe comienza un nuevo rumbo, uno mejor.
Con catorce años, Joe empezó a trabajar en la calle para poder vivir una vida mejor. Comenzó limpiando autos, consiguiendo cubetas y agua con vecinos. Estudiaba para aprender a leer y escribir con revistas que la gente solía tirar. El chico se veía bastante honesto, por lo que, las personas solían confiar en él de primera instancia. Pero no todo eran flores y maravillas, existían varías pandillas en las calles, especialmente en Iquique, las cuales no dudaban en deshacerse de cuerpos asesinados en las dunas de arena. Un día, un joven de alrededor unos 20 años, se le acerca a Quintana, diciéndole:
“Oye pendejo, vo’ estai’ en nuestra zona, así que vira noma’ de acá, me escuchaste?”
Comparando esas “pandillas”, con el infierno que vivió Quintana en el orfanato, no era absolutamente nada.
Comienza a ver que, al no reaccionar a la advertencia del sujeto, este se enoja y saca una navaja de su chaqueta, a la cual, en un rápido movimiento, Quintana la esquiva y logra desviar el brazo, enterrándoselo en el cuello. Al ver esto y tener sus manos llenas de sangre, Quintana se da cuenta que no tiene remordimientos, no le afectó en nada terminar con la vida de ese drogadicto, le asusta de cierta manera, pero rápidamente busca cómo ocultarlo, ya que, era de una banda. Luego de unas cuantas horas, Joe logra ocultar el cuerpo en las arenosas dunas de Iquique. Posteriormente pasado unos días, Quintana decide irse a limpiar a otros barrios, donde luego de semanas trabajando, logra juntar algo de dinero para arrendar una pieza.
A lo largo de los años Quintana ha ido trabajando, mejorando si vida económica y psicológica de manera lenta pero eficiente. Ya con 20 años, una vida mejor y sin nada que lo ate a su ciudad. Joe decide viajar a los Estados Unidos mochileando. Es así como después de 5 largos años, viajando por toda Sudamérica y América central, logra finalmente llegar a EE. UU. Joe Quintana llega finalmente a la ciudad de Los Santos, en EE. UU. Para poder iniciar una vida y poder recuperar la plena vida, que perdió a su corta edad.