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Dario Navarro Estado Unidense nació en el sur de Los Ángeles, en los barrios más marginales del lugar. Su padre, Lebron Navarro, un policía metido en la corrupción, abandonó a su madre embarazada y a Lebron cuando él solamente tenía 3 años. La vida de lebron nunca fue fácil, su niñez fue muy difícil puesto que, vio escenas que, para cualquier niño, son totalmente duras y traumáticas.Terminó acostumbrándose a vivir en un entorno lleno de peleas diarias, robos frecuentes, armas, alcohol, drogas... Su madre, Lola Morgan solía abusar de las drogas y el alcohol para, de alguna manera, superar el abandono de su marido y el entorno en el que vive. A veces, su madre no era capaz ni de dar dos pasos sin caerse, y esto obligó a Dario a madurar y perder su inocencia mucho antes que cualquier niño. Este tendría que proteger a su hermano menor, Mickey Navarro, básicamente ejercer una figura materna y paterna, lo que él nunca tuvo. Dario aunque no vivió en un buen entorno, siempre quiso estudiar en el colegio de su barrio, para al menos, ser algo consciente de su alrededor. Se graduó de la escolarización primaria y secundaria. La secundaria le costó mucho, puesto que a sus 15 años, a parte de estudiar, Dario trabajaba en el bazar de su barrio. Al no ser suficiente este dinero para poder sustentar a su madre, hermano y a sí mismo.Uno de los pensamientos más significativos de Dario en su adolescencia, eran acerca de la figura paterna que siempre le faltó, comenzó a investigar sobre su padre, Lebron Navarro, el cual le abandonó con tan solo 3 años, por lo visto, este era un comisario totalmente hundido en la corrupción, que tapaba todas las identidades de las bandas de los barrios a cambio de dinero, Lebron era asquerosamente rico, pero a la vez el mayor culpable de la corrupción y de la influencia de pandillas de su barrio.Las circunstancias que rodeaban día a día a la familia que él abandonó hace años. Dario tras averiguar todo esto, a partir de contactos y más contactos, solo pudo desarrollar un increíble odio y asco hacia su padre, pero, este nunca sería capaz de afrontarlo, pues dirigirse a él solo haría que Dario se rompiera en miles de pedazos y en su cabeza no podía existir esa posibilidad. También desarrolló un asco irracional a la corrupción y a los pandilleros , en sus pensamientos, todos estos eran igual que su padre y tenían los mismos principios. En la mente de Dario, Los pandilleros eran el peor cancer de la ciudad, y su padre, el paciente 0. Irse de Los Ángeles no era una posibilidad para Dario. Su madre, Lola Morgan, totalmente hundida en la droga era dependiente de él, y significaba para él una cadena que lo amarraba a nunca salir del infierno en el que, junto a su hermano Mickey, vivía diariamente. Un día normal, después de la jornada de trabajo de Lebron, recogió a su hermano del instituto, y ambos, al llegar a casa, se encontraron con la cruda escena de su madre, desplomada en el suelo, rodeada de jeringuillas, pastillas y botellas de alcohol. Alguna vez había sucedido, y llamando a la ambulancia, Lola se recuperaba, pero, esta vez, fue demasiado tarde. Lola Morgan, madre de Dario Navarro y Mickey Navarro había fallecido por sobredosis de varias drogas. Dario y Mickey, hundidos en la tristeza, tras una gran y seria conversación, llegaron a la conclusión que debían huir del infierno en el que han vivido, y de alguna manera rehacer su vida en otro lugar. Investigando vuelos, el más barato y pronto, sería uno destinado a Los Santos, pagaron con los ahorros que tenían, hicieron las maletas, y lo más pronto posible, Dario y Mickey llegaron a Los Santos.