Cassie Evans

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Nombre completo: Cassie Evans

Edad: 26 años, 1 de junio de 1999.

Lugar de nacimiento: Los Santos, California.

Nacionalidad: Estadounidense.

Sexo: Mujer.

Padres: Karen y Jack Evans. Un joven matrimonio que se conoció en la universidad de Los Santos. Ambos provenían de familias acomodadas. Fue el típico romance de instituto que al final llegó a ser fructífero. Cuando consiguieron ambos finalizar sus estudios, decidieron asentarse en la ciudad, comprando un acomodado apartamento en uno de los edificios más altos y emblemáticos de la ciudad.

Apariencia física: A medida que Cassie creció, se convirtió en una mujer de mediana estatura y complexión media. Tenía una larga melena rubia y unos ojos azules profundos y penetrantes. Mediría en torno a 176 centímetros, su abdomen sería plano. Tendría unas cuantas pecas que se repartían sobre todo por el centro de su rostro, las había heredado de su madre. También tendría unos pómulos marcados y unos gruesos labios. De normal siempre tiene ojeras, es algo que siempre intenta borrar con corrector, pero siempre se acaba notando.

Personalidad: Cassie es una persona decidida y segura de sí misma, con una fuerte convicción de lo que es justo y lo que no lo es. Es inteligente y siempre está buscando aprender y crecer, tanto en sus estudios como en su vida personal. También es una persona muy empática, que se preocupa profundamente por las personas a su alrededor y por las causas en las que cree.

Cassie es muy sentimental y vive intensamente las situaciones. Esto puede llevarla a experimentar altibajos emocionales, pero también le permite conectar profundamente con las personas y las situaciones. Es una persona que se toma las cosas en serio, y que siempre está dispuesta a luchar por lo que cree.

A pesar de su fuerte personalidad, Cassie es también muy amable y generosa. Tiene una gran cantidad de amigos cercanos que la aprecian por su honestidad y su capacidad de escuchar. Es una persona leal y confiable, que siempre está ahí para los demás cuando se la necesita.

En resumen, Cassie es una persona comprometida y apasionada, que busca constantemente la justicia y la igualdad. Es fuerte y decidida, pero también amable y empática. Es una persona que se preocupa profundamente por las personas y las causas que le importan, y está dispuesta a luchar por ellas sin importar el costo.

Infancia (historia y trasfondo): Cassie tuvo una infancia difícil, marcada por la violencia y el abuso doméstico. Desde muy joven, tuvo que lidiar con el comportamiento agresivo de su padre y la impotencia de su madre para protegerla. Esta situación la llevó a desarrollar una personalidad introvertida y cautelosa, rasgos que fueron desapareciendo con el paso del tiempo. A menudo tratando de pasar desapercibida para evitar la ira de su padre.

Sin embargo, también tenía una gran imaginación y era muy creativa, disfrutando de la lectura y el dibujo. Estos intereses la ayudaron a escapar de su difícil realidad y a encontrar consuelo en su propia mente. Además, Cassie siempre tuvo un sentido innato de la justicia, lo que la llevó a defender a otros niños que sufrían acoso en la escuela y a desafiar a sus maestros cuando consideraba que algo era injusto.

A pesar de la violencia en su hogar, Cassie encontró cierta estabilidad y apoyo emocional en su madre. La relación entre ellas era muy estrecha, y Cassie confiaba en su madre para todo. Sin embargo, la muerte de su madre a manos de su padre fue un golpe devastador para Cassie, y tuvo un impacto duradero en su vida y su personalidad. Cuando tenía apenas 9 años, su madre fue asesinada a manos de su propio padre. Este hecho fue un shock para Cassie, quien no podía entender cómo alguien podría hacer algo así a alguien a quien supuestamente amaba. Desde ese momento, Cassie empezó a interesarse por el tema de la violencia de género y a cuestionarse el papel de la mujer en la sociedad.

Adolescencia y adultez (historia y trasfondo): Cassie se sentía orgullosa de su feminidad, y siempre había sido una defensora acérrima de los derechos de la mujer. En el instituto, solía liderar marchas y manifestaciones para denunciar la discriminación y la violencia que sufrían las mujeres.

Cuando se graduó en el instituto, Cassie decidió que quería dedicarse a la lucha contra la violencia de género de manera profesional. Se matriculó en la universidad para estudiar derecho, con la intención de convertirse en fiscal y especializarse en este tipo de delitos. Cassie se tomó sus estudios muy en serio y se esforzó al máximo para conseguir las mejores notas. Durante su tiempo en la universidad, también participó en diversas organizaciones feministas y se convirtió en una activista muy respetada.

Después de graduarse en la universidad, Cassie empezó a trabajar en una firma de abogados de renombre en Los Santos. Cassie estaba feliz de poder trabajar en una empresa de este calibre, pero también se sentía frustrada de que la mayoría de los casos que tenía que llevar no estuvieran relacionados con la violencia de género. Sin embargo, Cassie seguía comprometida con la causa y continuaba participando en organizaciones feministas en su tiempo libre.

Un día, mientras estaba en el trabajo, Cassie recibió una llamada que cambiaría su vida para siempre. Era su padre, quien había sido detenido por la policía después de haber cometido otro asesinato. Cassie se quedó sin aliento al escuchar esto. Había estado años sin hablar con su padre después de lo que hizo a su madre, pero la noticia de que había vuelto a matar era demasiado para ella. Cassie se tomó unos días libres para intentar asimilar lo que había sucedido.

Durante esos días libres, Cassie decidió que tenía que hacer algo para honrar la memoria de su madre y para evitar que más mujeres sufrieran el mismo destino que ella. Cassie pensó en la posibilidad de presentarse a las oposiciones del departamento del sheriff del estado de California. Sabía que era una meta ambiciosa, pero también sabía que era lo que tenía que hacer. Cassie empezó a prepararse para el examen de oposición para convertirse en Sheriff del estado de California.

Durante los siguientes meses, Cassie se dedicó en cuerpo y alma a estudiar para el examen de oposición. No dejaba de repasar leyes y casos de violencia de género, y se preparaba físicamente para el entrenamiento que tendría que pasar si conseguía ser admitida en la academia. Cassie sabía que el camino no sería fácil, pero estaba decidida a conseguir su objetivo.

Actualidad: A día de hoy, sigue estudiando y preparándose para el futuro examen que pondrá en juego el futuro de Cassie. [Se irá actualizando con el paso del tiempo]