JAMES_MADDISON

[24loko18]

PADRES:
Robert Maddison (Fallecido): Afroamericano, exmiembro de una pandilla en Los Santos. Murió en un tiroteo cuando James tenía solo 10 años. Su ausencia dejó una gran marca en su hijo, quien creció con la mentalidad de que la vida en las calles es la única opción para sobrevivir.
Denise Carter (52 años): Madre soltera que siempre intentó mantener a su hijo alejado del crimen, trabajando largas horas como empleada de limpieza en un motel de mala muerte. A pesar de sus esfuerzos, James terminó siendo absorbido por el mundo que lo rodeaba.
APARIENCIA FÍSICA:
James es un joven de 1.83 metros, de piel oscura y complexión atlética. Lleva el cabello corto con un desvanecido bien marcado y suele usar una bandana cuando está en su barrio. Sus ojos oscuros reflejan la crudeza de la vida que ha llevado. Tiene varios tatuajes en el pecho, los brazos y el cuello, todos con significados relacionados con su pasado.

PERSONALIDAD:
James es un tipo inteligente, frío y estratégico, pero también sabe ser carismático cuando lo necesita. Aprendió desde joven que la calle no perdona a los débiles, por lo que siempre mantiene una actitud dura y desafiante. Sin embargo, en su círculo cercano, muestra lealtad absoluta. Es calculador en los negocios y nunca deja que las emociones nublen su juicio. No confía en nadie fácilmente, pero si alguien gana su respeto, lo considera familia.

INFANCIA:
James creció en uno de los barrios más peligrosos de Los Santos. Desde niño, vio cómo la pobreza y la violencia definían el destino de quienes vivían allí. Con su padre ausente y su madre luchando por mantener la casa, pasó la mayor parte de su tiempo en la calle, donde aprendió las reglas del juego. A los 12 años, ya hacía de “corredor” para los traficantes locales, transportando droga en su bicicleta. A los 14 años, tuvo su primera pelea seria, y a los 16, ya portaba un arma.

JUVENTUD:
Cuando cumplió los 18 años, James dejó de ser un simple mensajero y comenzó a involucrarse en el tráfico de drogas y robos organizados. Rápidamente se hizo un nombre en su barrio, destacando por su habilidad para negociar y por su sangre fría en situaciones de riesgo. Aprendió a moverse con astucia, evitando llamar la atención de la policía mientras acumulaba dinero y poder.

ACTUALIDAD:
Hoy en día, James Maddison es un hombre respetado (y temido) en las calles. Se dedica a la venta de droga, el robo de autos y ocasionalmente realiza asaltos a negocios. Aunque sabe que la vida que lleva es peligrosa y que cualquier día podría ser el último, también siente que no hay otra salida. En su mundo, solo hay dos caminos: ser el cazador o la presa.