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NOMBRE COMPLETO: Nathan Xiu.
EDAD: 25 años.
LUGAR DE NACIMIENTO: Los Santos, San Andreas.
NACIONALIDAD: Americano.
SEXO: Hombre.
APARIENCIA FÍSICA: Mateo Salazar es un hombre de 1.80 metros con raíces mexicanas que se le notan por todos lados, pelo marrón y ojos oscuros.
Nathan Xiu nació en Los Santos, en un barrio donde la comunidad mexicana luchaba día a día por salir adelante. Sus padres, trabajadores incansables, siempre le inculcaron la importancia del esfuerzo, la honestidad y el respeto. Desde pequeño, Nathan soñaba con hacer una diferencia en su ciudad, viendo cómo la delincuencia y la corrupción destruían familias y oportunidades..
Alegre por naturaleza, Nathan siempre encontraba una forma de sacar una sonrisa a los demás, pero tenía claro que no todo en la vida era un juego. Desde joven, aprendió que la justicia no siempre llegaba para todos y que muchas veces la gente buena era la que más sufría. Eso lo motivó a seguir un camino diferente: quería ser policía, no para imponer miedo, sino para ser la diferencia en un sistema que muchos veían roto.
Durante su adolescencia, evitó las malas influencias que atrapaban a muchos jóvenes en su barrio. En lugar de meterse en problemas, trabajaba en un taller mecánico y se entrenaba físicamente, preparándose para el futuro. Sabía que el camino para convertirse en oficial no sería fácil, especialmente en una ciudad como Los Santos, donde la línea entre el bien y el mal a veces parecía borrosa.
A pesar de su fuerte convicción, Nathan entendió que no bastaba con tener buenas intenciones. La ciudad podía ser cruel, y muchas veces las personas en las que confiabas eran las primeras en traicionarte. Aun así, nunca dejó que la desconfianza cambiara su esencia. Se mantenía firme en su sueño de entrar a la academia de policía y demostrar que no todos los oficiales estaban ahí por poder o dinero. Él quería servir y proteger de verdad..
Ahora, en la recta final de su preparación, Nathan se enfrenta al reto más grande de su vida: ingresar a las fuerzas del orden sin perder su identidad. Sabe que no será fácil, que habrá corrupción y decisiones difíciles, pero está listo. Porque en una ciudad como Los Santos, donde la oscuridad parece dominar, siempre hace falta alguien dispuesto a ser la luz.