Gravewalkers



  • Los Gravewalkers: Sombra sobre la ciudad

    En las calles oscuras y retorcidas de Los Santos, existe una leyenda que pocos se atreven a mencionar, pero todos temen: los GraveWalkers. No somos un grupo criminal cualquiera, somos la élite de los marginados, los reyes de las sombras. Nuestro nombre, Gravewalkers, proviene de nuestro dominio absoluto sobre la vida y la muerte en esta ciudad. Nos movemos como fantasmas, dejando tras de nosotros un rastro de humo de neumáticos y olor a pólvora.

    Nos apasionan los autos modificados, las máquinas rugientes que escupen fuego y devoran el asfalto a su paso. Cada uno de nosotros tiene un vehículo que no solo es un medio de transporte, sino una extensión de nuestra alma. Desde muscle cars que vibran con el poder de sus motores hasta deportivos que cortan el viento como cuchillas, nuestros autos son tan letales como nuestras armas.

    Hablando de armas, en los Gravewalkers tenemos una regla sencilla: si no puedes confiar en tu arma, no puedes confiar en nada. No solo las usamos, también las comerciamos. En las entrañas de la ciudad, hemos construido un imperio basado en el tráfico de armamento. Desde pistolas personalizadas hasta rifles de asalto, somos los proveedores más confiables y peligrosos de Los Santos. Si necesitas protección, sabes a quién llamar, pero si te metes con nosotros... bueno, que Dios se apiade de tu alma.

    La lealtad es nuestra moneda de cambio. No aceptamos traiciones y no perdonamos errores. Cada miembro de los Gravewalkers ha pasado por fuego y ha demostrado su valía. Somos más que un grupo criminal, somos una familia, una hermandad sellada con sangre y acero.

    Los rumores corren por las calles: "Si ves un auto rugiendo en la noche, con luces que parecen los ojos de la muerte, más vale que te apartes. Los Gravewalkers están cerca, y cuando ellos caminan, la ciudad tiembla."

    Y así seguimos, dominando las noches de Los Santos, caminando entre tumbas, vivos pero letales como espectros, siempre listos para el próximo desafío. Porque al final del día, somos los Gravewalkers, y esta ciudad es nuestro cementerio personal.


Accede para responder