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NOMBRE COMPLETO: Daniel Kansas
EDAD: 26 años
LUGAR DE NACIMIENTO: Filadelfia, Pensilvania
NACIONALIDAD: Estadounidense
SEXO: Masculino
PADRES
Chloe Nokk & Jonathan Kansas
• Chloe Nokk, una mujer americana con una pasión por el arte y la música, transmitió su amor por la creatividad a su hijo Daniel. Desde una edad temprana, Daniel demostró un talento innato para la pintura y la música, convirtiéndose en un artista autodidacta con un estilo único y expresivo.
• Jonathan Kansas, un hombre americano con una fuerte ética laboral, inspiró a Daniel con su dedicación y determinación. Jonathan era un hábil carpintero y transmitió a su hijo el amor por el trabajo manual y la habilidad para crear cosas con sus propias manos.
APARIENCIA FÍSICA:
• Daniel Kansas es un joven de apariencia imponente, trigueño que resalta sus ojos marrones y su barba media completa. Mide 1.83 metros de altura y su físico es resultado de su dedicación al ejercicio.
PERSONALIDAD:
• Daniel Kansas es un joven tranquilo y reflexivo, siempre dispuesto a ofrecer su ayuda a quienes lo necesiten. Posee buena oratoria, lo que le permite expresarse con claridad y persuasión. A pesar de ser algo reservado, suele tomar las cosas con tranquilidad y buscar soluciones prácticas a los problemas que se le presentan.
INFANCIA
Daniel Kansas pasó su infancia en un ambiente lleno de arte y música. Acompañado de su madre Chloe, exploraba museos y galerías de arte, desarrollando un aprecio profundo por la creatividad y la expresión artística. Su padre Jonathan, mientras tanto, lo introdujo en el mundo de la carpintería, enseñándole a usar herramientas y fomentando su amor por la creación de objetos únicos.
JUVENTUD
A pesar de ser un deporte en equipo, el baloncesto, junto con las lecciones de vida que le enseñó su madre Chloe, ayudó a forjar el carácter de Daniel y a comprender la importancia del trabajo duro para superar los desafíos de la vida. Este enfoque equilibrado en sus actividades le permitió desarrollar una mente creativa y una habilidad excepcional para combinar el arte con el deporte.
ACTUALIDAD
Daniel Kansas actualmente es un motero en el norte, se maneja por la zona de Sandy Shores, disfrutando de la libertad y la emoción que brinda la conducción de motocicletas. Aunque se ha dedicado a su pasión por el motociclismo, también sigue nutriendo su lado artístico. Ha establecido su propio taller de carpintería en su garaje y se dedica a crear piezas únicas utilizando madera y metal, fusionando su amor por las motocicletas con su habilidad artística.
"Vis leonis, fortitudo somniantis“
Luego de mucha reflexión, Daniel Kansas decidió dejar su pasado atrás. Dedicó sus esfuerzos a Downtown Cab Co., intentando pasar página, pero su pasado aún lo cazaba. Finalmente, se dio cuenta de que, muchas veces, para avanzar es necesario dar un paso al costado. Así que decidió darle un completo giro a su vida.
Abandonó Los Santos y se dirigió hacia Ámsterdam, Países Bajos, para comenzar a instruirse en el periodismo. Tras finalizar su licenciatura, decidió volver a Los Santos.
Mucho había cambiado. Amigos y familiares fallecidos, otros con los cuales perdió contacto, y otros simplemente avanzaron, y él no encontraba la manera de reconectar. Todo había cambiado.
El cambio no solo estaba en los nuevos edificios, las nuevas casas y los nuevos apartamentos. Las personas también habían cambiado. Ya no se veían moteros por Sandy Shores, quienes fueron sus antiguos compañeros, amigos o colegas. Ya no estaban, o al menos, él no los encontraba.
San Andreas había cambiado. Las oficinas estaban incómodamente desoladas, calladas. ¿Sus amigos? ¿Qué? La mayoría había cambiado su contacto, y las personas con las que construyó su pasado ya no estaban.
Volvió y se dio cuenta de que, a pesar de todo su esfuerzo, el pasado seguía arraigado en su memoria. Los recuerdos no se iban. La culpa, la decepción, la soledad seguían en el mismo lugar. Pero todo lo demás había cambiado. Él ya no era él. Él ya no era quien fue.
Él había cambiado. Y al notar ese cambio, se dio cuenta de que puede dar un paso adelante.
"Omnia mutantur, nihil interit“