Tyrone Jones



  • INFANCIA:
    Tyrone Jones, nació el 5 de mayo del 2000. Nació en una casa humilde situada en la recta de Groove Street. Desde muy pequeño se enteraba de las cosas y era bastante espabilado.
    Su madre, Roxanne Layton, era una mujer muy trabajadora y que se preocupaba por su familia, trabajaba en la gasolinera de Groove Street, aunque el sueldo no era mucho, le gustaba trabajar allí por el ambiente que había entre sus compañeras.
    Mientras, su padre Nathan Jones, se dedicaba al tráfico de drogas, así como también al
    tráfico ilícito de armas y otras cosas junto a sus compañeros de Groove Street. La gente de
    esa zona, era muy conocida ya que eran uno de los grupos criminales más conocidos de
    toda la isla de Los Santos, y eran la organización más peligrosa y que más tráfico tenían a
    su cargo.
    Desde muy pequeño, Tyrone estaba acostumbrado a estar rondando por el barrio a sus anchas, todos en el barrio le conocían porque siempre se paseaba por los jardines de las
    casas, como era muy típico verlo jugando en medio de la rotonda con cualquier cosa que encontrara tirada. Muchas veces, cuando su madre trabajaba, se quedaba durmiendo detrás del mostrador durante horas.
    Cuando Tyrone tiene cinco años, su madre pierde el trabajo en la gasolinera, ya que era empleada, y el jefe como estaba a punto de jubilarse, decide cerrar la gasolinera y adelantar la jubilación. Lo que hace que la economía de la casa disminuya bastante, ya que aunque su padre trabajara en el mundo del tráfico, ese dinero era dedicado prioritariamente para el barrio y para poder conseguir todo lo que más tarde se dedicaban a traficar.
    A los seis años, Tyrone empieza el colegio, una etapa bastante tranquila en su vida, que aunque aprobara las materias, siempre iba raspando a la nota justa, ya que no le importaba lo que le obligaban a estudiar.
    Cuando van avanzando los cursos, los profesores se empiezan a preocupar por él, ya que veían que no tenía la alegría de todos los niños, por lo que deciden llamar a su madre, diciéndole que han tomado la decisión de llevar a Tyrone unos días a un psicólogo, que les pueda decir si el comportamiento del niño es normal o si necesitaría algún tipo de tratamiento.
    En quinto de primaria, cuando tiene 10 años, empieza a tener su grupo de amigos dentro del colegio, quienes se tiraban mucho tiempo del día juntos dentro y fuera de la escuela.
    Ese grupo de amigos, pasó a convertirse en algo más que un grupo de niños, ya que al terminar el colegio con 12 años, se siguieron juntando todos.
    Se pasaban las horas muertas jugando juntos en el barrio, y les gustaba ir por la ciudad liándola. Terminando más de una vez teniendo que ir a buscarlos sus padres a comisaría,
    ya que se habían pasado haciendo cualquier cosa.
    Se les conocía bastante por la ciudad, por las veces que se pasaban por las tiendas
    robando cualquier cosa, ya que les gustaba mucho pasear por las pequeñas tiendas de la ciudad solo para molestar a los empleados de las mismas.
    Cuando Tyrone tenía 13 años, en el verano de ese mismo año, sucedió una de las cosas que más le afecta a Tyrone. Su madre un día estaba por la calle con su marido paseando, cuando pasó por la carretera un coche a altas velocidades junto con dos patrullas de policía detrás que lo estaban persiguiendo. Cuando se quisieron dar cuenta, a uno de los patrullas se le
    había cruzado un coche, por lo que tuvieron que pegar un volantazo, haciendo así que el coche patinara y se llevara a su madre por delante. Cuando eso sucedió, Tyrone estaba con sus amigos en la rotonda de Groove Street sentados a un lado viendo cómo la gente del barrio se ponía a derrapar por toda la calle y viendo como se tunean sus coches para que corrieran más. No se enteró del accidente hasta que uno de los vecinos del barrio, recibió una llamada de su padre, diciéndole que Tyrone fuera lo más rápido posible al hospital. Al llegar y ver a su madre así, empieza a encenderse por dentro de la rabia, y cuando su padre
    le explica lo sucedido, Tyrone se va del hospital furioso. Desde ese momento, se volvió una persona más fría y seria con los demás, además de que aumentara el odio y asco que tenía hacia la policía.
    Cuando Tyrone tenía 15 años, aprendió a abrir cerraduras de coches, ya que el hermano de uno de sus amigos con el que se llevaba muy bien, le había enseñado a cómo hacerlo, lo que no pensó es que iban a usarlo para ir por ahí robando los coches que vieran que tenían algo de valor dentro.
    Poco a poco dejó de ir a la escuela, prefería irse con su grupo de amigos por ahí antes que sentarse en una clase durante horas sabiendo que no le serviría para nada.
    Tras la muerte de su madre, su padre fue quien se tuvo que hacer cargo de Tyrone,
    enseñándole todo lo que él hacía en el barrio y como hacerlo, ya que al no seguir
    estudiando, deberá trabajar para mantener al barrio, por lo que decide empezar a darle estupefacientes que más tarde tendrá que ir vendiendo por la ciudad, teniendo cuidado de no ser pillado por la policía. También le enseña los negocios que él tenía con gente importante, donde no se movía únicamente droga, sino que también había intercambio de armas y otras cosas.
    Desde los 16 años, Tyrone empezó a mover varios tipos de estupefacientes, y ya empezó a conocer poco a poco todo lo que sucedía en el barrio, asistiendo con su padre a las reuniones importantes, donde se limitaba escuchar. A finales de ese mismo año, su padre fue pillado en un encuentro con la gente de otro barrio, a dónde fueron a hacer un intercambio de armas y dinero. Pero esa gente, cómo sabían la importancia que tenía Nathan para el barrio y lo buscado que estaba por la policía, decidieron infiltrar a un par de policías, que más tarde se llevaron detenido a su padre.
    Tras el encarcelamiento de Nathan, la cosa en el barrio se calmó bastante, dejaron un poco parado el negocio, para que así la policía no metiera preso a ninguno más. Pasaron casi 8 meses desde aquello, y Tyrone tenía 17 años.
    En uno de los vis a vis que solicitó con su padre, éste le dijo que tenía que seguir
    nuevamente con el trabajo, ya que sino serían reemplazados por otro barrio y les costaría volver a estar en el sitio en el que estaban.
    Tyrone tuvo que empezar a trabajar nuevamente, utilizando lo que su padre le enseñó antes de entrar a la cárcel de nuevo y todo lo que aprendió en las reuniones a las que asistió cuando era un poco más pequeño.
    Empezó moviendo la droga que tenían ayudándose de su grupo de amigos de toda la vida, decidieron comenzar repartiéndosela a los barrios más pequeños de la zona para que así la movieran ellos y no tener que ensuciarse las manos.
    Otros grupos criminales que estaban por la zona, se dieron cuenta de que en Grove Street había movimiento de nuevo, hecho que les ocasionó bastantes problemas ya que tras el encarcelamiento de Nathan, el barrio había estado muy parado, dejando así que los demás barrios empezaran a crecer y a dominar los negocios que antes controlaban la gente de Grove.
    Tras varios meses moviendo la droga, empiezan a darse cuenta de que el dinero que
    producen gracias a la droga, no les da para mantener a las familias del barrio, ya que los demás barrios también movían bastantes estupefacientes de la zona. Deciden comenzar a robar pequeños establecimientos como tiendas 24/7 y licorerías, para conseguir así algo de dinero extra además de las drogas que seguirán moviendo. Siempre se lograban escapar sin ser pillados por la policía, hasta que un día la cosa se le torció a Tyrone.
    Un día tuvo que ir a una tienda 24/7 a robarla ya que necesitaban dinero para comprarles comida a la gente del barrio. Decidió robar una moto que estaba aparcada en la calle para dirigirse a la tienda, en camino a la tienda empezó un patrulla a seguirle, aunque consiguió perderla rápido ya que poco a poco aprendió a moverse bien por los callejones de la ciudad.
    Cuando llegó a la tienda y se puso a robarla, le llegó el mismo patrulla que le había
    perseguido antes, y le reconocieron nada más ver la moto.
    El policía que se puso a negociar con él, decidió pedir refuerzos y llamó a las unidades de moto, para que así no pudiera librarse. Al empezar la persecución todo parecía ir bien, consiguió librarse del patrulla enseguida pero se le complicó bastante con las motos, ya que se empezó a poner nervioso al ver que no era capaz de perderlas. En una de las curvas por un callejón, la moto empezó a echar humo ya que anteriormente se había chocado con alguna farola y algún contenedor de basura. La moto se empezó a detener poco a poco, por lo que no le quedó otra a Tyrone que salir corriendo, pero el policía fue más rápido que él y consiguió detenerle.
    Se lo llevaron a comisaría donde le empezaron a procesar. Le procesó un policía que le tenía bastante manía a Tyrone ya que era quien siempre le perseguía pero que nunca conseguía pillarle, como sabía quien era, decidió imputar ante el juez todos los delitos acumulados que Tyrone tenía.
    ADOLESCENCIA:
    Tyrone Jones entra en la cárcel con 18 años, donde se encuentra con su padre con el cual se pelea, ya que le había advertido que tuviera cuidado con la policía y que no hiciera muchas cosas que perjudica al barrio de cara a la policía y Tyrone no le había hecho caso.
    El primer año en prisión pasó bastante rápido, Tyrone tenía una vida muy tranquila desde que entró. No tenía problemas con nadie y siempre evitaba cualquier encontronazo con otro preso, se dedicaba los días a hacer ejercicio además de los trabajos que le mandaban dentro de la misma.
    El segundo año, la cosa empeora dentro de la cárcel y eso hizo que Tyrone cambiara su forma de pensar dentro de la misma.
    Como cada semana, entraban los presos que se les asignaría a las celdas
    correspondientes. La celda donde se encontraba Tyrone siempre había sido muy tranquila, ya que una de las literas estaba vacía y en las otras dos había un señor mayor con el que siempre hablaba y con quien tenía buen trato y otro señor que estaba a punto de cumplir condena. Asignaron a su celda a Jacob Brook, uno de los presos más peligrosos del centro penitenciario, y uno de los hombres que siempre estaban buscando problemas dentro de la misma solo por alargar la condena de los demás presos, ya que la suya le daba igual.
    JB, intentó manipular a Tyrone para que fuera su “criado” dentro de la cárcel y poder así aprovecharse de él. Lo que Jacob no sabía es que Tyrone era muy orgulloso y no se dejaba pisar por nadie, por lo que decidió jugar con él. Le siguió el juego de que podría manipularlo unos días, en lo que conseguía un pincho o algo para poder defenderse, sacó una herramienta punzante de la huerta y la reformó para asegurarse de que con eso podría hacerle daño. Un día cuando JB manda a Tyrone a arrodillarse frente a él para ayudarle a vestirse, éste se arrodilla y a medio camino, le clava el pincho improvisado en un costado, haciendo así que éste empezara a sangrar poco a poco hasta dejarle inconsciente. Como era de esperar, los funcionarios le pillan haciéndolo, por lo que le meten en aislamiento unos
    días además de que esto le lleva a juicio, aumentando así la condena un año más por agredir a un compañero de celda.
    Tyrone empezó a hacerse bastante respetado en la cárcel, ya que había sido la primera persona que le había plantado cara a JB sin que le pasara nada después. Tras esto decidió volver a tranquilizarse y pasar el tiempo que le quedaba allí dentro sin meterse en problemas.
    ACTUALIDAD:
    Tyrone Jones sale de la cárcel con 21 años. Volviendo al barrio sin saber cómo estarán las cosas allí cuando regrese.
    Decide volver a su casa, donde vivió toda la vida, y donde tiene todas sus cosas. Vuelve al barrio como siempre, con la cabeza recta y sabiendo que no será fácil levantarlo de nuevo.
    Tiene claro que hará lo que haga falta para poder llevar el barrio adelante, contando con que ahora ya ha estado en la cárcel y ya sabe los fallos que no tiene que cometer para no entrar de nuevo.
    Sabe que al volver se encontrará con una situación que no se espera, y tiene fe de que los negros que se muevan por allí hayan cuidado bien del barrio y lo hayan puesto donde se merece.

    Descripción Psicológica:
    Tyrone Jones, tiene 21 años y mide 1,85 metros. Es una persona de complexión algo fuerte pesando 80 Kg, tiene los ojos marrón claro y solo tiene una sonrisa en la cara cuando es necesario, es agresivo con quien no le muestra respeto, lealtad, detesta las mentiras y la gente falsa, así como los racistas tiene un corazón enorme pero al mismo tiempo frío, el cual solo la gente que se gana su confianza puede ir conociéndolo poco a poco, es cariñoso con quien lo merece, y un diablo si es necesario con quien se lo gana. No tiene miedo a nada, solo a perder a su gente más cercana. Y a veces ni eso por que la perdió en su adolescencia. Un chico humilde y tranquilo pero al mismo tiempo problemático si es necesario. Se pone muy nervioso con cualquier tipo de persona cuando tiene algo ilegal encima y puede tener problemas a raíz de eso capaz de comerte alguna tontería. Tiene un temperamento bastante caliente aunque trata de controlarlo. No tiene una mente psicópata pero no temblaría a la hora de matar a alguien que le ha jodido, dado que es una persona de sangre fría con la gente que no le respeta.


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