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Historia Wahid Athnan - GTA HUB
Nombre de tu personaje, edad, y de dónde viene. Wahid Athnan, 32 años, viene de Seine-Saint-Denis, se localiza en la periferia o mejor dicho los suburbios de París a 9km de dicha ciudad.
Breve resumen de su infancia, juventud, madurez y evolución que tiene tu personaje a lo largo del tiempo hasta la llegada a San Andreas. Wahid Athnan nació en París, y ha pasado casi toda su vida en El 93. El 93 está en la Isla de Francia, la gran región formada por la aglomeración urbana de París y el cinturón que rodea a la capital, es un distrito de Seine-Saint-Denis llamado así por sus dos últimos dígitos del código postal, se hizo célebre por los disturbios de 2005, continúa al límite entre el paro, fracaso escolar, rap, identidad, pobreza y la droga que rodean el cinturón de la capital francesa.
El padre de Wahid era francés y con buena posición social, su madre francesa de origen magrebí, a la edad de 4 años su padre los abandonó y nunca más supo de él, su madre era una persona noble y responsable, crió prácticamente sola a su hijo e intentó apartarlo de todo peligro que había en las calles en las que estaban obligados a vivir ya que eran de origen muy humilde. Todo esto comenzó a forjar el carácter algo introvertido durante su infancia. Wahid se crió entre comedores y agentes de asuntos sociales debido a que su madre no conseguía trabajo y los gastos apretaban, se portaban muy bien con todo el que acudía y los ayudaban a intentar olvidar lo que tenían en casa además de proporcionarles alimentos de primera necesidad, ropa y algunos juguetes de segunda mano. Sus tíos tenían algo más de poder adquisitivo y también ayudaban en lo que podían. Cuando cumplió 6 años Wahid empezó a interesarse por los videojuegos, su madre nunca le pudo comprar una consola porque eran bastante caras por aquel entonces. Tuvo la suerte de que sus primos, Adil y Moha, tenían una y cada vez que su madre lo dejaba en su casa, podía echar unas partidas con ellos, esto se convirtió en una de las pocas vías de escape a lo que vivía en el día a día.
Wahid siempre iba de la mano de sus primos y de Ibra, un niño senegalés que conoció a los 8 años en el colegio y vivía en su mismo bloque, era su mejor amigo e iban juntos a todas partes, esto hizo que Wahid forjase un gran sentido de la lealtad. Juntos vivieron mil aventuras y se defendían entre ellos de los mayores y de otros niños algo salvajes del barrio, en las calles del 93 la vida de un niño era algo complicada, la educación escaseaba y algunos eran literalmente pequeños delincuentes. Wahid suele recordar sobretodo, un día que que estando con Ibra y sus primos, unos chavales que tendrían 3-4 años más que ellos llegaron al parque de donde se encontraban y después de una pequeña charla, les intentaron atracar a punta de navaja, echaron a correr todo lo que pudieron pero pronto los alcanzaron, forcejeando Wahid se fue contra un contenedor de basura y se abrió la ceja, en ese momento uno de los “pequeños atracadores” empezó a quitarle las zapatillas, cuando estaba apunto de conseguirlo, Adil realizó un placaje y tiro a uno de los niños contra el otro, Moha lo levantó y consiguieron huir, suele recordar esto particularmente por que le dejó un bonito recuerdo en forma de cicatriz en su ceja. Con sus primos también tuvo una estrecha relación hasta que recién comenzada la adolescencia, sobre los 14-15 años Moha se empezó a meter en asuntos turbios, era de esperar donde vivían y también porque la tía de Wahid no daba tanta importancia como su madre a los peligros que acechaban en la calle, solía decir que así se harían más fuertes, Adil, sin embargo era buen estudiante, menos alocado y mucho más responsable, Wahid se solía fijar en él, digamos que lo consideraba un ejemplo a seguir, incluso puede que viese en él la figura paterna que siempre le había faltado.
Durante las protestas de 2005, Wahid que ya tenía 17 años, participó enérgicamente, movido más por el verdadero motivo de las protestas (desigualdad, racismo, precariedad laboral, futuro) que por el que algunos de sus amigos de toda la vida, que fue el puro vandalismo, esto tuvo como consecuencia que estuviese unas cuantas veces en los calabozos. Desde los 19, Wahid estuvo trabajando como carnicero en un pequeño comercio de su localidad, el dinero que ganaba no era suficiente y con su madre enferma necesitaba un dinero extra, así que se vió obligado a meterse en el mundo de los trapicheos y el menudeo más de una vez, su primo tenía contactos con los que podías sacar un dinero extra haciendo de mula, el trabajo era simple aunque arriesgado, debían conducir un camión hasta los Países Bajos, concretamente hasta Oud-Beijerland, una pequeña pedanía con un pequeño polígono industrial a las afueras de Rotterdam, cargaban un contenedor y lo dejaban Reims(Francia), las normas eran claras, no preguntar, no abrir el contenedor, no hace más paradas de las necesarias y seguir la ruta al pie de letra. Wahid pasó más de medio camino temblando, pensando en todo momento que los estaban siguiendo o los pillarían, realizó este “trabajo” con su primo Adil, que por el semblante que que lucía ya lo habría hecho alguna vez, se le veía bastante tranquilo. A Wahid no le gustó nada hacerlo pero era necesario en ese momento. Por otro lado Adil, decidió opositar para la gendarmería, tardó un año, pero consiguió ingresar en el cuerpo, Wahid se sentía orgulloso de él.
De los 20 a los 25 Wahid ayudaba a su madre con el dinero que sacaba de los trabajos que iban saliendo y sobretodo de la carnicería donde trabajaba, lo poco que ahorraba lo invertía en ir a discotecas y fiestas de la capital francesa, compraba ropa “buena” de segunda mano y salía con Ibra en busca de ligues y diversión. Wahid era un tío guapete y tenía buen gusto para vestir, nunca tuvo mucho problema para ligar, con un par de copas se volvía un tío bastante extrovertido. Tuvo 2 relaciones aunque no pasaron a mayores.
A los 27 se enteró de que su madre padecía cáncer, dejó de salir y de gastar dinero para pagarle los tratamientos a su madre, comenzó a trabajar también en un pequeño taller de motos que Ibra se había montado, desde la adolescencia los dos compartían gustos y no de ellos era el motor, sobre todo las motos, en aquella época estuvo muy de moda el uso de scooters y motos de trial. Al pasar tanto tiempo en el hospital, Wahid conoció a una enfermera española con la que estuvo saliendo, se llamaba Carmen, sevillana con el pelo castaño y unos preciosos ojos azules, trataba muy bien a su madre y le conseguía algunos privilegios dentro del hospital, juntos pasaban el poco tiempo que les sobraba del trabajo y las obligaciones, a los dos años y en plena crisis, debido a los recortes en sanidad, el contrato de Carmen terminó y decidió volver a España, intentó convencer a Wahid de que se fuese con él, pero la enfermedad de su madre obviamente lo obligaba a quedarse, siguen manteniendo el contacto aunque obviamente con la distancia todo va a menos, estuvo haciendo esto hasta hace un año, inevitablemente su madre murió. Wahid quedó totalmente destrozado, sus tíos, Ibra, sus primos e incluso Carmen en menor medida y desde la distancia(aunque al parecer con pareja en España) intentaban apoyarlo y darle ánimos para que saliese adelante, pero algo reconcomía la cabeza de Wahid.
Tras pasar un par de años ahorrando de lo que sacaba en el taller y en la carnicería decidió comenzar una nueva vida lejos de dónde todo de alguna u otra forma no le ha ido del todo bien, dejando atrás la poca familia que le quedaba y a su amigo de la infancia.
La relación con su familia y su vínculo de amigos a lo largo de su vida. Wahid cuidó de su madre hasta el día de su muerte y le tuvo y le tiene un profundo amor y respeto, ella le inculcó una serie de valores que la vida le había negado desde su nacimiento. De su padre apenas tiene recuerdos ya que los abandonó cuando tenía 5 años, su madre tampoco le habló mucho de él durante su infancia. Deja atrás a Adil y Moha, sus primos, con los que mantuvo una estrecha relación. Casi llegando a la adoración por Adil y “respetando” las decisiones de Moha, ya que tiene bien claro que en el fondo tiene un gran corazón. Tuvo muchos conocidos durante su infancia, la mayoría han acabado mal y alguno incluso muerto, el ambiente en el que se criaron pasa factura, a algunos más que a otros. Su mejor amigo desde niños fue Ibrahima Cheikh, un joven de origen Senegales que acompañó a Wahid durante toda su vida, le dió trabajo en el taller que se montó al sacarse la ingeniería, compartían aficiones como el motor, las fiestas y las chicas.
Los posibles trabajos que ha desempeñado en el transcurso de su historia. Wahid se desenvuelve muy bien con los cuchillos y la carne, trabajó muchísimo tiempo durante su juventud en una pequeña carnicería del barrio, eventualmente consiguió un trabajo como camarero en caterings de eventos. También tiene algunas nociones básicas de mecánica ya que siempre andaban trasteando con las motos y Ibra le enseñó varias cosas en el taller, también trapicheó con drogas, pero nada serio.
Virtudes y flaquezas de tu personaje. Wahid tiene buenos principios y buen corazón debido a la educación de su madre, pero la calle le enseñó a defenderse y en ocasiones tiende a perder el control. Tiene un gran sentido de la justicia, es inteligente y sabe mantener la compostura. No conoce lujos, aunque tiene algún que otro problema con el exceso de fiesta, si algún día los consigue no se sabe cómo podría acabar. Hace deporte a diario.
Rasgos físicos y apariencia del personaje. Wahid mide 1.80m de altura, es de constitución atlética y es de tez morena, ojos verdes y pelo negro, suele llevar la barba arreglada o en su defecto una pequeña perilla. Le gusta vestir elegante, aunque no ha sido una persona pudiente. Tiene alguna que otra cicatriz en el cuerpo y una en la ceja, fruto de las protestas de 2005.
Miedos y preocupaciones. Wahid tiene un poco de inseguridad, puede que haya sido por no haber tenido una figura paterna en su vida, aunque su madre valió por las dos. Se ha vuelto un poco hipocondríaco debido a que su madre murió de cáncer hace un par de años. Le preocupa volver a la pobreza de la que proviene, no es que esté para echar cohetes ahora mismo pero viene de tocar fondo.