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Raúl nació en una familia con una estabilidad económica buena, no era una familia rica, pero no les faltaba de nada en casa, su padre trabaja 12 horas al día para poder conseguirlo mientras su madre se encargaba de la educación en casa y que todo estuviera en orden. Fué el hermano menor de los tres hijos que tuvieron sus padres.
Nació un 17 de Marzo a las 07:00 de la mañana, tras 4 horas de parto, el médico sostenía entre sus manos un chico de 3 kilos y medio con poco pelo y una mirada penetrante.
No tiene muchos recuerdos de su infancia, aunque si la recuerda feliz en la urbanización donde vivían. El colegio fue una época dura, Raúl creció bastante rápido, con 14 años ya media 1,83cm y su peso no era del todo adecuado según los cánones de belleza.. eso le llevó a recibir mucho bullying por parte de sus compañeros de clase y otros alumnos de otros cursos.
El deporte y los videojuegos fueron un salvamento para su mente y su vida, se quedaba hasta tarde después de colegio entrenando al Baloncesto con Carlos, el que consideraba su mejor amigo por aquella época y el cual jugaba con él en el equipo del colegio. Y por las noches a altas horas de la madrugada se conectaba a un mundo virtual donde evitar pensar que pasaría al día siguiente en clase, dormir 3h al día no era muy sano.. Esto hizo que las notas no salieran del todo bien y los profesores o bien por pena o bien por quitarse a Raúl de encima ya que para ellos era el causante de todos los males, lo aprobasen para que pudiera ir al instituto y no perdiera un año.
El instituto era un nuevo comienzo para él, hizo nuevos amigos, seguía practicando su deporte favorito que era baloncesto en un club bastante famoso en la ciudad y empezaba a sentir cosquilleos por las chicas.. Las notas seguían igual de mal, pero disfrutaba del tiempo al máximo sabiendo que en algún momento acabaría esa sensación de “vida plena”.
A los 17 años en algún momento sin saber muy bien cómo, mientras veraneaba cerca de su ciudad, una amiga suya puso en medio de su camino a Zaira. Una chica alta de 1.80cm, con pelo liso hasta las caderas y una cara perfectamente ovalada, una mirada intensa que hacía temblar a Raúl como nunca antes le había pasado.. Se enamoró perdidamente de ella al segundo de mirarle a los ojos. Fue un sentimiento mutuo y correspondido..
En los comienzos todo es bonito, risas, caricias, esa sensación de que el mundo es perfecto y que algo o alguien te está compensando por todos los males que pasaste anteriormente, hasta que por alguna razón que no sabes explicar muy bien, salen los caracteres de cada persona a flote y esa sensación pasa de ser la mejor del mundo, como si vivieras entre dioses a un infierno, con un dolor intenso en el pecho que no te deja que respirar por las peleas tontas y cosas que una vez creces, comprendes que son irrisorias.
La vida continúa, siguen los estudios, otras chicas que no llegan a suplir ese vacío, gente que pasa por la vida de Raúl como si fueran caramelos hasta que por fin llega el día, después de muchos pesares y mucho estudiar, consigue su título mas ansiado, el de Doctor en Psicología a sus 27 años.
Esa misma noche, en la fiesta post doctoral conoce a la persona que le removería de nuevo el mundo, Julieta, una chica de 22 años, alta, con una complexión fuerte y un carácter muy marcado, una mente tan inquieta que hasta a Raúl que ha estudiado psicología le sorprende, le abre un nuevo mundo.
5 años de vivencias son suficiente y bastan para que Raúl y Julieta se casen y tengan una “pequeña beba”, una hija de 3 kilos llamada Noah, su segundo amor.
Pero como la bolsa, todo lo bueno tiene un final, un accidente de coche pone fin a la vida de Julieta y Noah, dejando a Raúl de nuevo sumergido en un gran vacío el cual oculta tras una fachada de falsas risas y ficticia felicidad.
Tras lo sucedido y habiendo pasado 2 años del accidente, decide marcharse de Alicante y volar a Estados Unidos a la ciudad de Los Santos, por su bien mental, necesita cambiar de aires para volver a fortalecer su mente y tener un nuevo comienzo.